
Bruselas, 28 abr (EFE).- La junta de Fortis que debe pronunciarse sobre la venta del grueso de la entidad al banco francés BNP Paribas ha sido suspendida temporalmente ante la revuelta de los accionistas contrarios a seguir adelante con la operación.
El equipo directivo ha sido recibido con gritos de "dimisión, dimisión" y "vendidos", y también se han producido algunos lanzamientos de objetos a los directivos, que han tenido que ser protegidos por el servicio de seguridad.
La tensión ha aumentado tras la intervención del abogado Mischaël Modrikamen, que representa a un grupo de accionistas opuestos al acuerdo entre el Estado belga y BNP Paribas y que volvió a reclamar la suspensión de los derechos de voto de 170 millones de títulos en poder del grupo FORTIS <:FORB.BR:>(FORA.AM)
El recurso interpuesto ante la justicia por Modrikamen y otras dos asociaciones de accionistas, Deminor y Test-Achats, para bloquear el voto de esas acciones fue rechazada esta mañana por un tribunal de Comercio de Bruselas, reunido de urgencia.
Los demandantes argumentan que el grupo Fortis, propietario de entre 200 y 250 millones de títulos (sobre un total de 2.500 millones de acciones), lo que le obligaría a presentar una declaración de transparencia, algo que no ha hecho.