
Madrid, 2 feb (EFECOM).- Caja Madrid obtuvo un beneficio neto atribuido de 840,48 millones de euros en 2008, un 70,6% menos que en 2007 por la ausencia de los ingresos extraordinarios anotados entonces y también por la dotación a provisiones, aunque la ganancia recurrente (sin extraordinarios) mejoró el 5,6%.
Según informó hoy la entidad, su morosidad se quintuplicó en 2008, ya que se situó en el 4,87% frente al 0,90% registrado en 2007, al tiempo que su ratio de cobertura para insolvencias futuras se redujo hasta el 46,6% frente al 237% de 2007, aunque la cobertura con garantía hipotecaria era mejor, del 112%.
La entidad presidida por Miguel Blesa ha decidido, como casi todos sus competidores, destinar parte de sus beneficios a dotaciones, en concreto 350 millones de euros para provisiones voluntarias y otros 200 millones para financiar su Plan de Relevo Generacional 2008-2010, lo que ha influido en estas cuentas.
También se ha notado, explica la caja, la ausencia de los ingresos extraordinarios anotados en 2007, entre ellos las plusvalías de 2.333 millones por la venta de su participación en Endesa, los dividendos percibidos hasta entonces, y los dividendos y el beneficio que obtuvo por la venta del 21,5% de Realia.
A cierre de 2008, Caja Madrid tenía concedidos créditos a sus clientes por importe de 118.436 millones de euros, el 9,7% más que un año antes, explica la caja, que destaca que el crédito a empresas mantuvo en 2008 un papel "protagonista" al crecer un 16,4%, tras conceder más de 14.100 millones en esos doce meses.
Los créditos con garantía real, que incluyen las hipotecas, siguieron el mismo camino que en el resto de las entidades españolas y crecieron el 4%, hasta los 73.753 millones de euros, lejos de los crecimientos de anteriores ejercicios.
Además, la actividad crediticia fue financiada el año pasado "íntegramente" con los depósitos de sus clientes, un negocio en el que se han empleado a fondo con buenos resultados, ya que en sólo doce meses lograron captar 15.800 millones en imposiciones a plazo, el 52,7% más.
De esta forma, los recursos de clientes en balance alcanzaron los 138.881 millones de euros, un 10% más, mientras que los recursos totales se situaron en 155.468 millones tras crecer el 6,5%, por efecto del retroceso del 16% registrado por los recursos gestionados fuera de balance, sobre todo por la caída del 24,2% de los fondos de inversión.
Según explica Caja Madrid, a cierre de 2008 el volumen de negocio era de 273.900 millones de euros, un 7,8% superior al de 2007, al tiempo que sus niveles de solvencia se mantenían "sólidos", con un Tier 1 (ratio que mide los recursos propios de mayor calidad) del 7,5% y una posición de liquidez que superó los 9.000 millones.
En cuanto a los principales márgenes de negocio, el de intermediación -diferencia entre ingresos por créditos y gastos por depósitos- se situó en 2.320,86 millones de euros tras crecer el 4,1%, mientras que el ordinario o bruto retrocedía el 2,5%, hasta los 3.489,98 millones, lastrado, entre otras cosas, por el retroceso del 6% registrado por los ingresos en concepto de comisiones.
Tras restar los gastos, que alcanzaron los 1.921 millones de euros y crecieron el 12,9%, y otros 869,48 millones de pérdidas por deterioro de activos, entre otras cosas, el margen de explotación -el que mejor refleja el negocio puro bancario- se redujo a 781,78 millones, con lo que se mantuvo casi idéntico al del año anterior.
"Ante un entorno económico tan complejo como el que se prevé para 2009, que se inicia en un ambiente de incertidumbre y pesimismo generalizado", Caja Madrid tiene una "sólida posición de partida", materializada en su nivel de solvencia, el equilibrio de su balance y su "confortable" posición de liquidez, explica la entidad.