Zinedine Zidane camina al borde del precipicio. El entrenador del Real Madrid suma números de destitución. Y el equipo, lejos de remontar el vuelo, se hunde más. Sólo los éxitos recientes y ser Zidane le salvan de un posible despido del que, por ejemplo, no se libró Ancelotti. El italiano fue, durante una temporada, 'maestro' de Zizou. Ahora él, Zizou, está repitiendo el error que precisamente condenó a Ancelotti.
Un altercado vecinal tras un accidente de tráfico ocurrido el 6 de enero en Pedrera entre un vehículo en el que viajaban personas de origen rumano y el de una pareja de la localidad sevillana ha hecho que el año empiece 'movidito' en el Ayuntamiento.
Eric Abidal, exdefensa del FC Barcelona, ha relatado en un documental de Canal + Francia la pesadilla por la que pasó cuando se le diagnosticó cáncer de hígado. En aquel año, en 2011, jugaba todavía en el equipo blaugrana. Tuvo que pasar dos veces por quirófano y aquello no sólo le lastró a él, sino también al vestuario.
La policía de Australia investiga la muerte de un koala encontrado atornillado a un poste en el parque Broolo, cerca de la Costa Central del estado australiano de Queensland, y que ha provocado protestas de grupos defensores de los derechos de los animales a lo largo y ancho del país.
El Real Madrid tiene un problema. Es el Santiago Bernabéu. Ayer, en la vuelta de octavos de final de la Copa del Rey, se volvió a demostrar que los blancos se sienten incómodos en casa.
Apenas unas horas después de que el Palmeiras confirmase que Yerry Mina sería jugador del FC Barcelona, el propio Barça ha hecho oficial la operación. El central colombiano firma hasta 2023 y, según el club catalán, ha costado 11,8 millones de euros, cantidad abonada al Palmeiras y que éste, a su vez, tendrá que repartir con el Santa Fe, propietario del 20% del futbolista. El club blaugrana también tendrá que abonar 560.000 euros al fondo de compensación de la FIFA para los equipos en los que Mina se formase en su juventud.
Neymar marcó este miércoles contra el Amiens en la Copa de la Liga de Francia. Suma ya 20 dianas entre todas las competiciones. Ésta la consiguió de penalti. Anotado el gol, el futbolista brasileño se quitó la bota y se la puso sobre la cabeza haciendo malabares. Así estuvo un buen rato. Todas las cámaras le apuntaron para sacar la imagen. La marca de la bota, Nike, estaba bien visible. Al ver el festejo, fueron muchas las voces que en Francia señalaron a Neymar por hacer, otra vez, publicidad encubierta de esta marca deportiva en pleno partido.
El Real Madrid está mal. Zidane lo niega. Lo hace abiertamente. Ayer, en sala de prensa, el francés habló de sentirse "satisfecho" porque su equipo había dado "buenas sensaciones". Ver para creer, pensarán muchos madridistas que no comprenden cómo es posible que el técnico del campeón de Europa y Liga se conforme con empatar a dos con un Segunda en su estadio. ¿Es lo que realmente piensa Zidane? Puede que sí, pero con matices.
El Palmeiras, club propietario del 80% de los derechos federativos de Yerry Mina (el otro 20% pertenece a Santa Fe de Colombia), ha confirmado a diversos medios españoles, entre ellos la agencia EFE, que el central es ya nuevo jugador del FC Barcelona. El traspaso se cerrará por 12,3 millones de euros de los que 9,84 serán para el Palmeiras, 1,9 millones para el Santa Fe de Colombia y 560.000 euros para el fondo de compensación por derechos de formación. Según el diario As, Mina tendrá una cláusula de 100 millones de euros y firmará por cinco temporadas.
Dice Zidane que no quiere fichajes. Que no necesita refuerzos. Que está a muerte con los suyos y que, como en la metáfora, todos se hundirán con el barco si se va a pique. Un discurso motivador para aunar voluntades en el vestuario que sin embargo en el palco no se entiende de la misma manera. Un sector importante de la zona noble quiere fichajes y los quiere ahora. El de Kepa, por ejemplo. El de Icardi, por nombrar otro futbolista. Un dueto al que se ha unido en las últimas horas un tercer jugador. Gonçalo Guedes, mediocampista ofensivo del Valencia, está en la agenda del Real Madrid.