R.Madrid | Perspectiva
Sergio Ramos, capitán del Real Madrid, se perderá el duelo que este miércoles medirá a su equipo y al Sevilla en la ida de octavos de final de la Copa del Rey. Es parte de su maldición 'autoinfligida'. Una forma de 'manía' en la que el defensa insiste una y otra vez y que sigue 'castigando' a su equipo. Porque a Ramos le gusta forzar su físico en ocasiones más de la cuenta. Eso, obvio, deja secuelas físicas en forma de nuevas dolencias que merman su rendimiento.