El Dalai Lama presentará su dimisión como jefe espiritual de los tibetanos si la situación se deteriora en Tíbet, indicó en una entrevista con periodistas en la ciudad india de Dharamsala, donde se encuentra el Gobierno tibetano en el exilio.
Por otra parte, diecinueve manifestantes tibetanos han muerto este martes por disparos de la policía en la provincia china de Gansu (noroeste), anunció al Gobierno tibetano en el exilio, que ha "confirmado" la muerte de 99 personas en los recientes disturbios en Tíbet.
El primer ministro de China, Wen Jiabao, ha responsabilizado al Dalai Lama de los sangrientos disturbios registrados en los últimos días en el Tíbet ya que posee "abundantes pruebas" de que el se encuentra detrás de los sangrientos disturbios.
Al término de las dos semanas de sesión plenaria del Congreso Nacional del Pueblo (el poder Legislativo), Wen aseguró en Pekín que su país posee "abundantes pruebas" de que el "grupo del Dalai Lama" se encuentra detrás de los sangrientos disturbios. El primer ministro chino, Wen Jiabao, ha asegurado que la puerta del diálogo con el Dalai Lama, líder religioso y espiritual tibetano, "sigue muy abierta", pero, clarificó, siempre que reconozca que el Tíbet y Taiwán son parte de China.
Wen señaló que, no obstante, los disturbios de la semana pasada en Lhasa, la capital tibetana, y otras zonas del país probaron las dos caras del Dalai Lama, premio Nobel de la Paz en 1989. "No sólo hay que tener en cuenta lo que el Dalai dice sino también lo que hace", añadió el gobernante en rueda de prensa tras reiterar que el líder tibetano es el responsable de haber incitado las revueltas de Lhasa y las protestas contra legaciones diplomáticas chinas en todo el mundo.
protesta del Dalai Lama
Hace unas semanas el Dalai Lama pedía, en una entrevista para una televisión británica, que aumentaran las protestas a favor de la libertad en el Tíbet, en coincidencia los Juegos Olímpicos de agosto en China. Más tarde, el Dalai, que en los últimos años ha moderado bastante su discurso hacia Pekín, aseguró que no estaba a favor de un boicot contra esos juegos.
Emisarios tibetanos han viajado en los últimos años a Pekín para dialogar con representantes del gobierno comunista, aunque a no muy alto nivel y sin notables resultados. El Dalai Lama, que hace unos años pedía la independencia del Tíbet, actualmente se inclina más por una ampliación de la autonomía de esa región, aunque Pekín asegura que sus intenciones no han cambiado y continúa siendo un separatista.
Problemas al organizar los JJOO
El primer ministro chino, Wen Jiabao, admitió en rueda de prensa que es "inevitable" que en el proceso de organización de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 estén apareciendo problemas, pero expresó su deseo de que sean resueltos y reiteró el llamamiento a que la cita deportiva no sea politizada. "Los Juegos son una reunión de pueblos de todo el mundo, y en ellos se debe respetar el espíritu olímpico, no politizar los Juegos", destacó Wen ante los periodistas.
Pese a los muchos problemas, Wen afirmó que el mundo quedará "satisfecho" con los Juegos Olímpicos de Pekín, y, en tono poético, aseguró que "las sonrisas de 1.300 millones de habitantes (de China) serán respondidas por las de gente de todo el mundo". En los últimos meses, la organización de los Juegos Olímpicos se ha encontrado con numerosas críticas e incluso llamamientos al boicot, en la mayor parte procedentes del extranjero.
Las revueltas en Lhasa, la capital tibetana, y su represión han desatado aún más llamamientos al boicot, que ya fue solicitado por grupos como Reporteros Sin Fronteras (RSF) por la detención de periodistas y 'ciberdisidentes'. Otras presiones de carácter no político también han ensombrecido la organización de los Juegos, como la decisión del plusmarquista mundial de maratón, el etíope Haile Gebrselassie, de no disputar la prueba reina del atletismo debido a la alta contaminación de Pekín, o el anuncio estadounidense de que el equipo olímpico llevará su comida porque no confía en la que se prepara en China.