El Departamento de Economía del Gobierno de Aragón, en colaboración con la Obra Social de Ibercaja y el Cluster de Automoción de Aragón (CAAR) han elaborado el Plan Estratégico de Formación del Sector de la Automoción para impartir formación especializada a todos los trabajadores en toda la pirámide profesional del sector e impulsar la competitividad de las empresas, además de favorecer el desarrollo en la comunidad de la industria 4.0.
Este plan, que es pionero en el país, se basa en la elaboración de un estudio, que ha sido realizado por la consultora S&F Consultans, en el que se identifican los conocimientos tecnológicos y habilidades que necesitan las empresas del sector de automoción en Aragón con el fin de seguir siendo competitivas, además de analizarse la formación que ya se imparte en la comunidad en relación a este sector de actividad e identificarse las áreas de mejora que hay. Unas acciones que se han concretado en una hoja de ruta con acciones a corto, medio y largo plazo que involucran a las instituciones públicas, académicas y agentes sociales, entre otras.
Dentro de las medidas que ya se han puesto en marcha dentro de este plan figura el Programa DOA (Dirección de Operaciones en Automoción), que está dirigido a directivos con el fin de capacitarles en la dirección de operaciones productivas y logísticas en el sector de la automoción.
Este programa, que se pone en marcha a través del Cluster CAAR y de su CAAR Academy, en colaboración con Ibercide (el centro de formación de Ibercaja), arrancará el 18 de marzo con 300 horas de formación con el fin de "apoyar la estrategia de negocio de las empresas", según ha explicado el presidente del Cluster CAAR, Benito Tesier, quien ha añadido que el 30% de los profesores serán directivos del sector.
Además, el programa también se abrirá a desocupados a través de tres plazas para profesionales que vean en este sector una oportunidad laboral para lo que se ha cerrado con Ibercaja un programa de becas, que permitirá sufragar al 50% el coste de este programa, de manera que se pueda impulsar su empleabilidad.
Aparte, el plan, dentro de las medidas a medio plazo, incluye una oferta formativa para cubrir diferentes aspectos como la gestión de proyectos o el impulso a la responsabilidad social empresarial, mientras que a largo plazo se contempla la creación de un certificado de profesionalidad para operarios del sector, entre otros.
Invertir en formación
La formación se perfila como clave para que las empresas del sector de la automoción puedan hacer frente a los retos que tienen ante sí y poder ser competitivas. "Tras cinco años en los que la automoción era noticia por otros temas, España vuelve a figurar como un país atractivo. En 2014 se ha producido un crecimiento del sector a nivel nacional y en Aragón se ha mejorado el dato de producción hasta superar los 2,4 millones de vehículos". Además, se han exportado alrededor de 2 millones de coches, según ha indicado Benito Tesier. En el año 2014 también se realizaron inversiones por valor de 65 millones de euros, lo que ha favorecido nuevas adjudicaciones.
Asimismo, Aragón y el País Vasco tienen un peso del sector sobre el empleo industrial del 30%, porcentaje que en el caso de la comunidad autónoma supone el 22,2% en la industria de componentes de automoción y del 8,2% en la fabricación de vehículos.
Un peso del sector ante el que es importante "invertir en formación, apostar por la I+D+i y por las nuevas tecnologías para anticiparse a los cambios", según ha explicado Benito Tesier.
Esta necesidad de formación también ha sido puesta de manifiesto por el consejero de Economía del Gobierno de Aragón, Francisco Bono, quien ha indicado que "la inversión en capital humano beneficia a la empresa que hace esa inversión, pero también al conjunto porque eleva el nivel de cualificación de la profesión. Tener profesionales formados es un factor de competitividad. No sólo se es competitivo por precio, sino también por la cualificación. Las empresas tienen la competencia más dura de todas: la de competir con plantas dentro de la propia compañía y fuera de Aragón".
Por su parte, Teresa Fernández, directora de la Obra Social de Ibercaja, ha destacado que Aragón "no puede permitirse el lujo de no aprovechar los mimbres que tenemos porque tenemos la posibilidad de trabajar sobre ellos". Y una prueba de ese trabajo es este plan de formación.
Áreas de mejora
El plan detecta una serie de áreas de mejora para las que se proponen diferentes iniciativas. Según ha explicado Mar García Ramos, de la consultora S&F Consultants, una de ellas es la cualificación de operarios para lo que se propone la creación de un certificado de profesionalidad para el sector de la automoción, además de incidir en la formación para la adquisición de más competencias y habilidades ya que va a ser un perfil al que se le van a pedir más polivalencia.
Además se apuesta por la cualificación de mandos intermedios a través de la formación en gestión de proyectos y en habilidades, así como en la cualificación de directivos con formación en dirección de operaciones.
Otras mejoras comprenden la cualificación a todos los niveles con formación en Responsabilidad Social Empresarial, que es una de las oportunidades que ofrece el sector, aparte de mejorar la dispersión de la demanda formativa para lo que se propone la agregación de demanda con el fin de saber qué necesitan las empresas.
El plan igualmente propone mejorar el desconocimiento de la oferta formativa a través de la creación de un catálogo de proveedores de formación a modo de herramienta viva e incidir en la formación práctica con, por ejemplo, modelos como las fábricas de aprendizaje de Alemania.
Finalmente, se aboga por el reciclaje del profesorado y que el cuerpo docente pase más tiempo en las empresas y fábricas para vincular más el mundo empresarial y académico, además de por incorporar las nuevas tecnologías a las plantas para integrarlas en los procesos industriales y añadir más valor tal y como demanda la globalización.