La entidad financiera y el comité de empresa comenzarán la próxima semana el período de información y consultas para cerrar un acuerdo para el expediente de regulación de empleo por el que este año se reducirá la plantilla en 233 personas. También deberán abordar el cierre de oficinas y los traslados de personal.
Miembros del comité de empresa y representantes de Ibercaja se verán las caras el próximo día 25 de febrero dentro de una reunión con la que comenzará el proceso de información y consultas para intentar llegar a un acuerdo sobre el nuevo ajuste que la entidad financiera tendrá que acometer este año, según han explicado fuentes sindicales a elEconomista.es
La previsión es que se plantee un nuevo expediente de regulación de empleo, tal y como ya había adelantado Ibercaja a los representantes sindicales a principios de este año, que afectará a unos 233 trabajadores nacidos en los años 1956 y 1957, quienes de forma voluntaria se podrán acoger a este ERE.
Durante la negociación no se prevé que pueda haber falta de acuerdo en las condiciones que se apliquen a los trabajadores que se acojan al expediente, puesto que ya el año pasado se abordó que para el ERE de 2015 se establecerían las mismas del anterior expediente, que contemplaban la percepción del 80% del salario neto más un plus de 12.00 euros.
Este será el tercer ERE que aplique la entidad y estos trabajadores se sumarán a los cerca de 500 que ya han abandonado Ibercaja con anterioridad.
Pero además de la salida de trabajadores, ambas partes también deberán abordar el cierre de oficinas y el traslado de personal. Unos puntos que justo pueden ser el principal problema en la negociación.
Y es que Ibercaja debe avanzar en su proceso de reestructuración tras la incorporación de Caja 3, entidad con la que muchas oficinas, sobre todo, en Zaragoza existe duplicidad en varias zonas e, incluso, en las mismas calles. El año pasado la entidad cerró un total de 73 oficinas.
