La empresa bodeguera está presente en más de 30 países, comercializando el 98% de su producción en el exterior. Brasil, Vietnam y México son sus próximos mercados objetivo.
Se creó en 1953 como cooperativa que elaboraba y vendía vinco a granel, aunque desde el principio tuvo una clara vocación internacional realizando ventas en países como Francia y, posteriormente, en Alemania, país en el que ya cerró un contrato hace quince años para comercializar cinco millones de botellas.
Una presencia internacional que se ha ido intensificando con el paso del tiempo y, sobre todo, a raíz de los cambios organizativos que se realizaron en la bodega en 2007 y de las inversiones que se realizaron por valor de 4 millones de euros para tecnología, desarrollo de mercados y modernizado de la línea para alcanzar una capacidad de 10.000 botellas por hora.
Hoy en día, estos cambios y la apuesta por los mercados exteriores, ha permitido que Bodegas Paniza esté presente en más de 30 países y que sus ventas internacionales supongan el 98% de su producción, destinándose tan solo un 2% al mercado nacional, sobre todo, a la comunidad aragonesa.
La bodega, con sede en Paniza y cuyos viñedos están dentro de la DO Cariñena, ha registrado un crecimiento "en los últimos seis años del 500%", que ha venido sobre todo de la mano de los mercados internacionales, según explica José María Andrés, gerente de Bodegas Paniza, a elEconomista.es, quien añade que se ha ido incrementando la comercialización, cerrando el año 2014 con 13,5 millones de botellas vendidas a pesar de la mala coyuntura económica.
Y el objetivo es seguir creciendo porque para este año 2015, Bodegas Paniza -que comercializa sus vinos bajo marcas como Paniza, Jabalí, Esencia, Viñas Viejas o Artigazo, entre otras-, espera vender alrededor de 15 millones de botellas.
Los vinos de Bodegas Paniza -que en un 80% vinos tinos de variedades como el tempranillo, garnacha o macabeo, mientras que el 20% es producción de vino blanco con variedades como el chardonnay, entre otras-, se comercializan principalmente en mercados como Alemania y Reino Unido, siendo los más importantes, así como en otros países de Europa.
Además, "estamos en China, Japón, Corea y Estados Unidos y países de Sudamérica", indica José María Andrés. Una presencia en el exterior que también se apoya con la presencia de los vinos de la bodega en las principales cadenas de venta.
Aunque el 98% de sus vinos se venden en el exterior, Bodegas Paniza va a seguir incidiendo en los mercados exteriores. El objetivo, aparte de consolidar su presencia en los mercados en los que ya está presente, es conseguir una mayor implantación en Brasil y México "en los que todavía tenemos poca presencia", así como en Vietnam donde la empresa todavía no ha realizado ventas.
Son mercados que se abordarán a través de ferias sectoriales en los países y con reuniones con importadores, además de apoyarse también para seguir ganando más presencia en el exterior en campañas promocionales que están llevando a cabo varias denominaciones de origen aragonesas en Estados Unidos para impulsar las ventas de los vinos de la variedad de uva garnacha, típica de la comunidad aragonesa. Precisamente, el mercado de Estados Unidos es "emergente y está aumentando el consumo cada año y los vinos españoles están teniendo una buena aceptación".
Unas líneas de trabajo que permitirán a Bodegas Paniza seguir creciendo. La empresa bodeguera, que aglutina a 400 socios y tiene una superficie de 2.500 hectáreas, ha cerrado el año 2014 con una facturación de 17,5 millones de euros, lo que supone un crecimiento de más del 10% en comparación a 2013.
La previsión es que en 2015 se continúe con este crecimiento sostenido y se finalice el ejercicio con una facturación de alrededor de 20 millones de euros.
