En la actualidad se exporta a Alemania y a los Países Nórdicos trigo duro y frutas de hueso. El objetivo es aumentar las ventas en el exterior para lo que se colaborará con la Cámara de Comercio y con Aragón Exterior.
Aumentar la presencia en los mercados exteriores es el principal objetivo que se ha marcado el Comité Aragonés de Agricultura Ecológica -tras la constitución de la nueva junta rectora y su constitución como corporación de derecho público-, dentro del plan estratégico que se ha diseñado para el período 2014-2020.
La exportación es uno de los pilares de este plan estratégico con el fin de abrir nuevos mercados, ya que hasta ahora los productos de agricultura ecológica de Aragón se destinan principalmente a Alemania y a los Países Nórdicos. En concreto, se exporta entre el 60% y 70% del trigo duro y entre el 70% y el 80% de las frutas de hueso.
Una apertura de mercados para la que está previsto trabajar con Aragón Exterior y los servicios de internacionalización de la Cámara de Comercio y que es clave para el sector "porque nuestro mercado no está capacitado para absorber toda la producción", según explica José Miguel Sanz, presidente del Comité de Agricultura Ecológica, quien añade que este tipo de productos cada vez están teniendo más aceptación, produciéndose un aumento de la demanda en el país de hasta el 100% en el caso concreto de algunos productos.
Un éxito al que contribuyen iniciativas que se están llevando a cabo como el mercadillo agroecológico que se celebra en Zaragoza, entre otras, y que se están extrapolando a otros puntos de la geografía española.
Aparte de impulsar las ventas en los mercados exteriores, el plan estratégico recoge también otra serie de acciones centradas en el registro de operadores, el apoyo a los costes de certificación y a la implantación de la norma de calidad 17065, aparte de incidir en impulsar la investigación para recuperar variedades como la línea de trabajo que se está llevando a cabo con el Centro de Investigación y Tecnología Agraria (CITA) en la recuperación de la variedad autóctona de trigo duro BIDI-7, que es muy demandada por la industria y los fabricantes de pasta. Otro de los puntos fundamentales se centra en la formación de los operadores.
Con estos planes, se pretende impulsar el sector en la comunidad aragonesa y hacer frente al descenso que se ha producido en los últimos años, ya que Aragón ha pasado de 72.000 hectáreas cultivadas de agricultura ecológica a 60.000 hectáreas, aunque desde hace tres años la superficie se está manteniendo al igual que el número de operadores.
Deuda
El Comité de Agricultura Ecológica de Aragón mantiene una deuda de 182.000 euros que dejaron sus predecesores y a la que, en la actualidad, no pueden hacerle frente para lo que se mantienen negociaciones con la administración autonómica para poder fijar un calendario de plazos que permita finiquitarla, ya que según ha explicado el director general de Alimentación y Fomento Agroalimentario, Luis Miguel Albarrán, "no se puede condonar" por decisión de la Unión Europea.
Una situación ante la que el consejero de Agricultura del Gobierno de Aragón, Modesto Lobón, se ha mostrado a favor de establecer unos plazos "cómodos", que "no hipotequen la vida del comité". Además, ha anunciado en la presentación del plan estratégico del Comité Aragonés de Agricultura Ecológica el mantenimiento de las ayudas agroambientales para este sector.
Un apoyo económico que desde el comité consideran insuficiente por el agravio con otras autonomías como Andalucía, Navarra, Murcia y Valencia.