Las empresas promotoras y la denominación de origen han firmado el acuerdo para la instalación del centro de economía circular, que cuenta con la asistencia técnica del Clúster Biomasa & Energía y la entidad francesa APESA. Este sistema permitirá a los viticultores un ahorro de hasta 700.000 euros al año.
Con la firma de este acuerdo se ha dado un paso más en la puesta en marcha de CEIS-Campo de Cariñena (Centro Energético Innovador Sostenible) a través del que se llevará a cabo un proyecto pionero de producción de biomasa y economía circular en la DO Cariñena a partir de los sarmientos y residuos de las viñas.
Según el presidente del cluster Biomasa & Energía, Francisco Javier de Miguel, esta tecnología tiene como uno de sus objetivos finales permitir a los 1.600 viticultores de la zona un ahorro global de entre 300.000 y 700.000 euros al año ya que, hasta ahora, tenían que asumir un gasto de unos 45 euros por hectárea. En total, la denominación de origen reúne un total de 14.500 hectáreas.
El CEIS-Campo de Cariñena recogerá estos residuos de las viñas y producirá una energía limpia y menos costosa de la que se beneficiarán los habitantes de la zona, creando así un sistema de economía circular.
De esta manera, según explica De Miguel, se "permitirá la implantación de innovadoras tecnologías en el conjunto de los procesos productivos, desde los cultivos al aprovechamiento integral de los residuos generados, que serán utilizados en la generación de calor para el municipio".
Las primeras estimaciones señalan que se podrá alcanzar un ahorro del 50% en el coste de la calefacción de edificios, aparte de obtener otra serie de beneficios como la atracción de nuevas inversiones en el polígono industrial al disponer de energía térmica competitiva para la actividad industrial.
Entre otros beneficios, el proyecto también facilitará la reducción de la emisión de la huella de dióxido de carbono en hasta el 16%. Una disminución importante, ya que en algunos países en los controles de calidad que se realizan a las botellas de vino se solicita la cantidad de dióxido de carbono producido en la elaboración, según indica el presidente de la DO, Antonio Ubide, quien además ha añadido que Cariñena exporta el 75% de su producción total.