La organización agraria denuncia que la Unión Europea sigue sin dar soluciones al problema del veto ruso y pide una revisión del sistema de crisis en el sector de frutas y hortalizas que desde que se modificó en 2007 no ha servido para acometer sus fines.
La organización agraria UAGA ha denunciado que a día de hoy todavía no hay medias concretas para solucionar la situación generada por el veto ruso. Desde el sindicato señalan que la alimentación es una cuestión estratégica y que los agricultores y ganaderos "no podemos vernos sometidos a juegos de presión derivados de conflictos económicos, políticos o estratégicos".
UAGA señala que la situación se está complicando cada vez más por lo que solicitan la puesta en marcha de la retirada y no comercialización de una cantidad suficiente de producto y de manera efectiva a nivel europeo.
Además, reivindican una revisión del sistema de crisis en el sector de frutas y hortalizas, que desde su modificación en 2007 no ha servido para el fin para el que fue creado, y la implantación de un "sistema de gestión de crisis grave".
Para la organización, "es imperioso establecer un sistema de retiradas ágil y accesible a todos los agricultores, financiado al 100% con fondos públicos y que actúe automáticamente con una compensación digna cuando los precios alcancen niveles que comprometan seriamente la rentabilidad del agricultor. Se han padecido crisis recurrentes y no hay sistema eficaz establecido al que recurrir para no tener que implantar parches en estos momentos críticos".
Además, desde UAGA también consideran que deben aplicarse medidas extraordinarias de gestión de crisis como el Artículo 219 de la OCM única y el Artículo 25 del Reglamento 1306/2013 de financiación, gestión y seguimiento de la PAC (fondo de reserva) para aquellos sectores que se vean afectados por el embargo ruso.
Al margen de las actuaciones de choque necesarias para el sector de fruta de hueso y otros sectores que se ven implicados en el embargo ruso, igualmente señalan la conveniencia de que se lleve a cabo un control exhaustivo de precios percibidos por los distintos agentes de la cadena alimentaria, especialmente en el eslabón de la distribución.
De este modo, apuntan que se debe evitar la especulación en la cadena, tanto en el ámbito del Estado como a nivel de la UE, de tal manera que los precios en destino se adecuen con rapidez a la situación de precios en origen y se controlen las caídas injustificadas en productos no afectados. Además, señalan la necesidad de la puesta en marcha de campañas de promoción que destaquen la importancia del consumo de frutas y hortalizas de temporada.
UAGA indican otra línea de actuación basada en el reforzamiento del principio de preferencia comunitaria, ya que consideran que, en las circunstancias actuales, no se pueden realizar concesiones comerciales a ningún país tercero y han de comprobarse el estado de las relaciones con determinados países.
En este sentido, indican que la Unión Europea ha de entablar contactos y emprender actuaciones políticas con los socios comerciales preferenciales (Marruecos, Turquía?) o en proceso de alcanzar ese status (Mercosur) y que pretenden sustituir a los productos UE en el mercado ruso. Finalmente, creen que se debe trabajar en la búsqueda de nuevos mercados para obtener resultados a medio plazo. Una apertura que, en su opinión, debería posibilitarse a través de la Unión Europea y no como estados independientes, de la misma forma que se produce la apertura a las importaciones de países terceros.
Situación actual
Desde UAGA explican que la situación, por ejemplo en fruta de hueso, la sensación creciente es de colapso. En algunas zonas se está recomendando no recolectar y hay creciente interés por la retirada y la no cosecha en campo. En fruta de pepita, la pera Conferencia, en plena recolección, ha experimentado una severa caída y sus precios se encuentran al 50% de la pasada campaña por estas fechas (30-35 céntimos/kg salida de almacén, 20-25 céntimos/kg al agricultor, por debajo de costes de producción). La recolección de pera Williams y, sobre todo, Alejandrina se prevé muy complicada (ésta última que suele tener como destino importante el mercado ruso). La manzana también se encuentra en cotizaciones similares. Ha comenzado la recolección de Gala y se sitúa en los 30-35 centímos/kg).
En hortalizas, la principal hortaliza afectada de momento es el tomate. Se observa una caída del 50% de las cotizaciones desde el comienzo del veto en el tomate rama (22-25 céntimos/kg actualmente al agricultor, por debajo de costes de producción).