El índice de confianza de los consumidores estadounidenses elaborado por la Universidad de Michigan cayó en febrero hasta los 69,6 puntos desde los 78,4 de enero. Los analistas esperaban un descenso más pequeño, hasta los 76 enteros. Se trata del nivel más bajo del índice desde al menos febrero de 2002, el mayor desplome desde 2005 y una caída que para muchos es sinónimo de la restricción del gasto típico de recesiones.