La economía de Estados Unidos ha entrado en una recesión que será más dolorosa y prolongada que un declive normal, según Richard Curtin, director del sondeo de la confianza de los consumidores de la Universidad de Michigan. Las presiones inflacionistas persistirán a pesar del retroceso del consumo, complicando la tarea de la Fed , ha señalado Curtin en un informe. Esta no es una recesión ordinaria. Las consecuencias durarán mucho más que un declive típico , asegura. Los consumidores podrían tomar medidas más drásticas para estabilizar sus finanzas en medio de los altos precios del combustible y los alimentos, el estancamiento de los ingresos y el endeudamiento récord , advierte Curtin.