
Pablo Carrasco, exdirectivo de RTVE y de la productora andaluza ZZJ, abandona el cargo cuatro años y medio después de acceder a él. Tenía la decisión tomada, pero esperó a firmar el acuerdo programa con la Junta hasta 2015.
Pablo Carrasco ha anunciado su dimisión como director general de la Radio Televisión de Andalucía, RTVA, cargo que ocupaba desde hace cuatro años y medio -octubre 2008-. Le sustituye provisionalmente, hasta que el Parlamento regional apruebe el nombramiento del nuevo máximo responsable de la televisión regional, el actual director de Canal Sur Radio, Joaquín Durán. No está claro si este directivo se hará cargo de manera permanente o si los tres grupos políticos buscarán otro candidato, sea de consenso o no. Carrasco abandona su puesto más de un año y medio antes de que venciera su mandato, en noviembre de 2014.
Carrasco, que tenía tomada la decisión de dimitir desde hace meses según fuentes consultadas por elEconomista, ha querido dejar encauzados parte de los problemas que acucian al ente público. En concreto, el acuerdo marco para que la RTVA tenga asegurada hasta 2015 incluido una aportación pública de 138 millones, como el propio Carrasco y su jefa directa, la consejera de Presidencia Susana Díaz, firmaron en diciembre pasado.
Sin embargo, el cierre de Canal Sur 2 en septiembre pasado como consecuencia de los necesarios recortes de presupuesto acometidos en la empresa -que perdió 38 millones en 2012 y prevé sumar números rojos por otros 22 este año- y la necesaria reducción de un 5 por ciento de los costes salariales para este año, hasta dejar el gasto de personal en 81 millones, han tensionado su gestión y su relación con los sindicatos. El propio Carrasco ha visto cómo su sueldo se reducía desde los casi 140.000 euros brutos de 2008, cuando llegó al cargo, hasta los cerca de 80.000 previstos para este año.
Y en rueda de prensa para explicar su dimisión ha reconocido que esta bajada de sueldo ha sido uno de los motivos de su salida. "La retribución es algo tremendamente serio, depende de la experiencia, de la valía, de la responsabilidad que se desempeñe y del mercado". Los sueldos de los directivos y profesionales tiene que estar "ligada" a estos parámetros, ha añadido.
A su juicio, los criterios por los que se regulan este tipo de retribuciones son "diferentes" a los de las salarios de los políticos y, en este sentido, ha dicho que se han tomado decisiones que no ha compartido ni le han parecido bien, en referencia a las limitaciones de sueldo establecidas para los dirigentes de las empresas públicas andaluzas. En concreto, que ningún alto cargo cobre más que el presidente andaluz José Antonio Griñán: 64.000 euros fijados para 2013. Y, para los gerentes de las empresas y agencias públicas, el tope se establece con el sueldo de los viceconsejeros: casi 60.000 euros.
Otros motivos
Las fuentes consultadas, que explican que Carrasco tiene otras oportunidades laborales pero que por el momento se queda en su casa, señalan también a las fuertes presiones de IU, socio del PSOE en el Gobierno andaluz, para introducir a directivos y empleados afines en la RTVA. Algo que no cuadraba con la necesidad de reducir costes de personal y ajustar la plantilla de 1.600 funcionarios y laborales actual. Carrasco confirmó en la citada rueda de prensa que trabaja en un proyecto ligado a la televisión que se desarrollará "desde Andalucía para el resto del mundo", sin dar más detalles.
Los sindicatos, fuertemente influidos por IU, también han criticado duramente su gestión y los necesarios ajustes a realizar en una televisión deficitaria. Y ello pese a que Carrasco siempre ha negado que barajara ninguna medida traumática contra la plantilla como los enormes EREs de Canal 9 en Valencia o Telemadrid, que han llevado a prescindir de tres cuartas partes de la plantilla en ambos casos. El nuevo convenio colectivo de la RTVA, que se está renegociando, es una de las patatas calientes que Carrasco deja a su sucesor. La Junta quería que estuviera firmado en marzo, recogiendo esa bajada del coste salarial del 5 por ciento para 2013, pero la nueva situación en la cúpula deja este plazo en el aire.
Las mismas fuentes señalan además que la decisión de Carrasco no ha estado determinada por una posible pérdida de confianza de la Junta de Andalucía, algo que él mismo ha recalcado al asegurar que siempre se ha sentido respaldado por Susana Díaz. El directivo, que ya acumuló una experiencia de 16 años en la RTVA (1989-2005), recaló luego como director de Antena y Contenidos en RTVE de la mano de la primera directora del ente bajo el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, Carmen Caffarel. En 2007 fue relevado del cargo -tras la salida de la propia Caffarel en enero de ese año- y regresó a Andalucía como director general de ZZJ, una de las productoras de cabecera de la RTVA, de donde saltó en octubre de 2008 a la dirección general de la cadena pública.