
Se marchan el director de la oficina del portavoz, Francisco Perujo, el director de gabinete del Consejero de Empleo, Rafael Calveche, y el director general de Formación Profesional.
El barco de la Junta sigue haciendo aguas. Ayer lunes, una vez celebradas las elecciones municipales en las que el PP logró la mayoría absoluta en todas las capitales de provincia de la comunidad, se conocieron tres nuevas dimisiones de altos cargos del Gobierno andaluz. Dos de ellas en la Consejería de Empleo: la del jefe de Gabinete del consejero, Rafael Calvache, y la del director general de Formación Profesional, Andrés Sánchez.
En tercer lugar, deja su cargo el director de la oficina del portavoz del Gobierno, Francisco Perujo, que regresará a su puesto como director de comunicación de la Universidad de Cádiz, según adelantó El País. Todos ellos dejan sus puestos alegando el eufemístico "razones personales".
En el caso de Calveche y Perujo, sus salidas se habían comunicado internamente antes de las elecciones y se había pactado que se conocería su salida una vez celebrados los comicios.
Estas dimisiones se suman a la catarata de salidas vivida en la Junta de Andalucía, tanto en la consejería de Empleo como en la de Gobernación, cuyo ex titular, Luis Pizarro, abandonó el Gobierno por su enfrentamiento con el presidente, José Antonio Griñán. En Empleo, hace menos de un mes que dimitió también por motivos personales la directora general del Servicio Andaluz de Empleo (SAE), Alejandra Rueda, tras apenas un año en el cargo. Fuentes de la Consejería desligaron esta salida del escándalo de corrupción en los ERE, como también hicieron ayer tras la salida de los dos nuevos altos cargos de este departamento.
Por su parte, tras la dimisión de Pizarro abandonaron Gobernación el viceconsejero José Antonio Gómez Periñán, y los directores generales de Administración Local y Espectáculos Públicos.
Con todo ello, son ya siete las dimisiones de altos cargos de distinto nivel que suma el PSOE andaluz que gobierna la Junta sólo en el último mes y medio. Y la derrota en las municipales, en las que el PP logró más votos que el PSOE por primera vez en la historia democrática de Andalucía, podría deparar más sorpresas a medio plazo.