
Los empresarios critican que la imagen de la región se asocie a los ERE y a los cursos de formación.
El primer Gobierno de coalición de izquierda en tres décadas de historia autonómica no ha llegado a los tres años de vida. Las dos formaciones políticas que han gobernado la región -PSOE e IU- en este periodo han acabado tirándose los trastos a la cabeza y responsabilizándose mutuamente de la ruptura. Tras este periodo, la autonomía ha visto cómo su tasa de paro se ha situado en el 34,2 por ciento, más de diez puntos por encima de la media nacional.
Pese al impacto de la crisis, agravada por la corrupción, y las disputas políticas, Andalucía tiene la capacidad empresarial, exportadora e innovadora para crecer sólidamente y converger plenamente con el resto de Europa. Así se desprende en los informes elaborados por distintas entidades sobre coyuntura económica de la comunidad.
Mejora del PIB
Analistas Económicos de Andalucía, la sociedad de estudios económicos de Unicaja, estima que la economía andaluza mantendrá su perfil de recuperación a lo largo de este año 2015, en el que podría crecer por encima del 2,0 por ciento. Este crecimiento se basaría en la aportación positiva de todos los sectores no agrarios, prosiguiendo la recuperación del mercado de trabajo. De este modo, tras crecer el empleo un 2,4 por ciento en el promedio de 2014, el ritmo de crecimiento podría acelerarse ligeramente a lo largo de este año. No obstante, y pese a la recuperación observada en 2014, no hay que olvidar que el PIB andaluz retrocedió algo más de un 9 por ciento desde principios de 2008 hasta finales de 2013, disminuyendo el número de puestos de trabajo en un 20 por ciento, por lo que aún restarían varios años para volver a los niveles previos a la crisis.
El desempleo, disparado
Sin duda, el principal reto de la economía andaluza sigue siendo la elevada tasa de paro, que sigue superando el 30 por ciento, y mantiene un diferencial de más de diez puntos con respecto a la media española. En Andalucía, a 31 de enero de 2015, había 1.037.716 parados, lo que la convierte en la comunidad en la que más sube el paro.
El modelo productivo, clave
El propio modelo productivo tiene una gran incidencia sobre este diferencial, registrando los sectores agrario y de la construcción tasas de paro superiores al 40 y 30 por ciento, respectivamente, siendo en el sector industrial del 11 por ciento. Precisamente, el peso de la industria en la economía andaluza es inferior al promedio nacional, siendo este un sector donde el empleo se muestra más estable y la destrucción de empleo resulta menos intensa que en otros sectores.
De ahí, la necesidad de seguir apostando por la actividad industrial y de lograr una estructura productiva más diversificada, centrada en actividades que generen más valor añadido, para lo que la inversión en I+D+i resulta crucial. Todo ello, sin olvidar aquellas actividades en las que Andalucía es un referente, como el turismo o la industria agroalimentaria, y otras, como la construcción, que deben recuperarse, aunque no sería deseable que siguiendo el mismo patrón que con anterioridad a la crisis.
Las reformas pendientes
Pero, la recuperación no será sostenible si no se emprenden o se sigue insistiendo en las reformas que necesita la economía, como la de la Administración, una reforma laboral que intente evitar la dualidad del mercado de trabajo, sin olvidar la necesidad de alcanzar pactos necesarios para el futuro de Andalucía y España, como pueda ser el de la Educación, que no debería verse afectada por cambios en los Gobiernos.
La Universidad andaluza ha vuelto a ser la universidad pública de España más universal y más barata. Las matrículas de las universidades andaluzas, además de ser las menos costosas, no han discriminado en función de las carreras técnicas o sociales a estudiar, y además han permitido el fraccionamiento de pagos.
Dificultades financieras
Según el Gobierno andaluz, las dificultades financieras en esta comunidad vienen provocadas, aparte de por la crisis económica, por el incumplimiento secular del Ejecutivo de Mariano Rajoy de la Disposición Adicional Tercera del Estatuto de Autonomía, de forma que el Gobierno central "tiene una deuda que se eleva a más de 1.300 millones en inversiones en el último año, lo que ha provocado que las inversiones en el presupuesto de la Junta hayan sido tan escasas".
El Fondo de Compensación Interterritorial (FCI) ha disminuido en más de 115 millones en el último año, mientras que el recorte en atención a la dependencia se ha cifrado en 314 millones y se ha visto compensado con autofinanciación. El Gobierno central exige a la Junta para 2015 un ajuste presupuestario de más de 600 millones de euros para conseguir alcanzar el objetivo de déficit.
Para la Junta, el funcionamiento inadecuado del modelo de financiación y los continuos cambios provocan que Andalucía haya dejado de percibir de 2009 a 2012 más de 3.000 millones. Por ello, defiende la necesidad de reformar el sistema de financiación autonómica.
Récord de turismo
El último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmó que 2014 ha sido el mejor año de la historia del turismo andaluz. Fue un ejercicio de récord para el sector turístico de Andalucía, aun en una coyuntura económica compleja de la que no escapan los mercados nacionales ni internacionales. Aunque algunos indicadores ya avisaban de que 2014 había sido el mejor del turismo de Andalucía, el INE lo terminó de ratificar con el dato de que los alojamientos reglados andaluces registraron el pasado año cerca de 57 millones de estancias, lo que supone un 5,7 por ciento más que en 2013.
El número de visitantes que utilizaron alojamientos reglados también creció, con 18,2 millones de viajeros, un 5,2 por ciento más. Según el INE, el récord histórico desde que se tienen estadísticas oficiales son los casi 57 millones de estancias, superando en más de dos millones de pernoctaciones al registro máximo previo, de 2007.
Previsiones laborales
Para 2015, se espera un mayor ritmo de crecimiento del empleo, coincidiendo con las mejores expectativas de crecimiento de la producción, de forma que el número de todos los sectores productivos, a excepción de la agricultura, y con especial intensidad en la industria y la construcción (3,3 y 3,4 por ciento respectivamente). Por su parte, el empleo en los servicios puede registrar un crecimiento del 1,7 por ciento en el promedio del año.
Teniendo en cuenta, por otra parte, que el número de activos podría reducirse de nuevo (- 0,7 por ciento), el desempleo disminuiría en un 5,2 por ciento, hasta situarse la tasa de paro en el 33,5 por ciento de la población activa, 1,6 puntos menos que en el promedio de 2014, una tasa aún significativamente elevada. Andalucía lleva tres años demandando insistentemente un plan especial de empleo, como los que se concedieron a Canarias y Extremadura en 2012 y 2013, y que Moncloa ha rechazado.
Más inversión
En lo que se refiere a la inversión, se prevé una aceleración en su ritmo de crecimiento hasta el 3,4 por ciento estimado para el conjunto del año. La Junta de Andalucía, a través de su Consejería de Economía, ya ha anunciado en esta campaña electoral que realizará un esfuerzo para que haya inversión pública en 2015, aunque ha matizado que será mucho menor de lo que le gustaría y de lo que es necesario para que Andalucía cree empleo y salga de la crisis económica.
Repunte de las exportaciones
Andalucía ha alcanzado en 2014 el quinto año consecutivo de récord en las exportaciones, que se han situado en 26.512 millones de euros, un 2,1 por ciento más que el año anterior y un 83 por ciento más que en 2009, lo que supone hasta 33 puntos más que la media nacional. De este modo, se consolida un año más como la tercera comunidad en ventas al exterior, a sólo 0,6 puntos de la segunda, Madrid.
Sector agroalimentario
En productos agroalimentarios, la comunidad es una potencia en Europa, aunque también destaca en conocimiento tecnológico, ingeniería, productos aeronáuticos o combustibles, minerales transformados o acero. Los 26.000 millones obtenidos en los mercados exteriores en 2013, un 80 por ciento más que en 2009, son uno de los cimientos para volver a crecer de manera sostenida. La economía andaluza ha creado en 2014 más de 400 nuevas empresas y ha generado 10.000 empleos. En la actualidad cuenta con cerca de 7.000 empresas y cooperativas de economía social que ocupan a casi 65.000 trabajadores y vinculan a más de 400.000 socios.