El Hospital público Universitario General de Villalba realiza más de 450 intervenciones anuales para tratar la patología benigna de pared compleja. Aunque en general se considera que la patología de pared abdominal es benigna, su complejidad puede ser significativa y comprometer seriamente la calidad de vida del paciente.
Hernias y eventraciones mal resueltas, o que recidivan, pueden transformarse en cuadros quirúrgicos de elevada dificultad. En este contexto, Hospital Universitario General de Villalba -hospital público de la Comunidad de Madrid- ha consolidado un modelo quirúrgico avanzado y multidisciplinar para tratar con éxito tanto casos simples como aquellos más exigentes.
"Una hernia puede parecer un problema menor, pero si recidiva o se complica, el abordaje se vuelve mucho más delicado. Por eso es fundamental una indicación quirúrgica precisa y una técnica bien ejecutada desde el primer momento", explica la doctora María José Fraile, jefa del Servicio de Cirugía General del hospital.
En el centro villalbino se abordan más de 400 casos anuales de patología de pared abdominal no compleja, y más de 50 intervenciones de eventraciones complejas que requieren planificación individualizada. Para estos últimos casos, el hospital ha desarrollado circuitos específicos de valoración y preparación preoperatoria, donde intervienen distintos especialistas según las necesidades de cada paciente.
"Los casos complejos pueden requerir la implicación de cirujanos plásticos, anestesistas, endocrinos, fisioterapeutas, médicos rehabilitadores o radiólogos vasculares, además del equipo quirúrgico habitual. La coordinación entre todos ellos marca la diferencia en el resultado final", señala la doctora Fraile.
Además, el General de Villalba cuenta con un programa de optimización preoperatoria y recuperación intensificada que se aplica a todos los pacientes, mejorando los tiempos de recuperación y reduciendo complicaciones postoperatorias. Este enfoque personalizado es especialmente importante porque los síntomas de estas patologías pueden tener un gran impacto en la vida diaria del paciente. Las hernias o eventraciones suelen manifestarse con dolor, deformidades visibles o molestias al caminar, toser o realizar esfuerzos. En casos más avanzados, incluso pueden producirse dificultades respiratorias.
En todo este proceso, el papel de la enfermería especializada resulta de gran importancia, tanto en la valoración preoperatoria como en el seguimiento postquirúrgico. Su intervención garantiza una atención continua, segura y centrada en las necesidades del paciente.
TECNOLOGÍA
El hospital dispone de todos los recursos técnicos disponibles en la actualidad para el tratamiento de la patología de pared, desde cirugía abierta hasta abordajes mínimamente invasivos, laparoscópicos o robóticos. En este sentido, la incorporación en 2023 de un robot quirúrgico de última generación ha supuesto una mejora significativa en la precisión y seguridad en casos de gran complejidad.
Asimismo, en determinadas situaciones se aplican técnicas avanzadas de asistencia quirúrgica como el neumoperitoneo preoperatorio o la utilización de toxina botulínica para facilitar el cierre de defectos abdominales de gran tamaño.
"Gracias a estas tecnologías podemos abordar mínimamente de forma segura casos que antes solo podían resolverse con cirugías abiertas muy agresivas. Es un salto cualitativo para el paciente y para el equipo quirúrgico", destaca la cirujana.
Adicionalmente, en el hospital villalbino la atención en cirugía digestiva es rápida, además de eficaz, incluso para los casos más complejos, una vez se establece la indicación quirúrgica lo que, sumado a su calidad asistencial y enfoque multidisciplinar, han consolidado su experiencia en este tipo de intervenciones.
De cara al futuro, el centro sigue apostando por la innovación. "Esperamos incorporar avances en materiales protésicos y nuevas técnicas de tratamiento tisular que hagan las reparaciones aún más seguras y duraderas, que abren un campo muy prometedor", concluye la doctora Fraile.