
José Manuel de Riva renunció el pasado martes a la presidencia de Ametic, pese a contar con el 78% de apoyo de la junta directiva. Lo hizo para propiciar el consenso entre todos los asociados, incluido el puñado de empresas críticas que amenazaron con abandonar la patronal tecnológica en caso de que se confirmara su reelección.
En el último momento, cuando ya todo estaba dispuesto para asumir de nuevo el mando para los cuatro próximos años, De Riva retiró su candidatura en un proceso que calificó de "viciado". Su intención, ahora, consiste en favorecer la unidad de una asociación, sin convertir su persona en un obstáculo. Dos días después de aquella sorprendente decisión, en un encuentro con elEconomista, De Riva sólo tiene palabras para "tender puentes" que ayuden a Ametic a seguir siendo fuerte, con el trabajo de todos, incluidas las grandes empresas que anunciaron días atrás su salida.
¿Por qué renunció a presidir Ametic y cuándo lo decidió?
Sucedió durante las 48 horas previas a la Asamblea de Ametic, motivo por el que consideré que no era conveniente desconvocarla. Además, quería que los asociados conocieran de primera mano la situación y pudieran intervenir. La decisión se tomó una vez que lo consensuamos con el resto de los cargos directivos y todos acordamos que lo mejor era retirar la candidatura, porque el proceso electoral se había viciado durante las últimas semanas, por las manifestaciones que se habían difundido desde algunos medios, tratando de influir en el resultado y de condicionar el voto.
¿Intentó reconducir la situación con las empresas críticas?
Sí. Tuvimos una reunión el viernes 25 de noviembre, para tratar de buscar el consenso para que la candidatura fuera aceptada por las empresas críticas. Pero no conseguimos avanzar, por lo que optamos por no realizar las elecciones y volverlas a convocar, dando tiempo a que se puedan buscar consensos, de forma que se pueda encontrar, mediante el diálogo y la negociación, puntos de vista comunes que unan a toda la asociación.
En su discurso ante la Asamblea aludió a "unos pocos que no se adaptan al juego democrático, creando un grave daño de imagen a Ametic". ¿A quién se refería?
Creo que está en la mente de todos cuáles son las empresas que han querido manifestar su disconformidad o lo han manifestado. Quiero decir que en los cuatro años que he estado de presidente de Ametic se ha reunido la Junta directiva con la periodicidad establecida, hemos mantenido debates abiertos, todo el mundo se ha podido expresar y a mí nadie me ha expresado su descontento sobre la forma en la que estaba dirigiendo la asociación. Si eso lo hubiesen manifestado, hubiéramos tomado medidas. Porque mi compromiso ha sido tratar de encontrar el nexo de unión entre todos, para que todos se sientan a gusto en Ametic. El caso es que no se han manifestado y me enteré por los medios de comunicación. Por eso mi sorpresa ha sido grande. Si esas empresas no están contentas con la gestión, que lo hubieran dicho. Eso no consta en ningún acta de ninguna reunión, ni ha habido manifestación expresa al respecto.
¿Por qué Telefónica, Ericsson, Nokia, Orange y Vodafone amenazaron con salir de Ametic si usted hubiera resultado reelegido?
El motivo se lo tendría que preguntar a ellos. A mí no me lo han dicho. Ellos han manifestaron que abandonarían la asociación y centraron el problema en mi persona. Pero si no me explican qué es lo que no he hecho bien, me es muy difícil defenderme ante acusaciones tan ambiguas como que mi modelo ha sido presidencialista, por ejemplo.
¿Tiene problemas con Telefónica?
Con Telefónica no he tenido nunca ningún problema. Es una gran empresa, con excelentes profesionales y allí tengo muy buenos amigos. Creo que el problema es de alguna persona o personas que no quieren dar el brazo a torcer. Ellos, de alguna forma, tenían un candidato en mente para presidir Ametic. Esto no les funcionó porque se dieron cuenta de que no tenían un consenso suficiente. La mayoría la tenía yo, porque previamente había preguntado a los asociados si querían que me presentara y me apoyaron de forma amplia, con el 78% de adhesión. Cuando a mí se me acusa de que no estoy siendo transparente o estoy siendo presidencialista, tenían que haberme explicado en qué consiste. La relación con todas las empresas críticas ha sido magnífica. Hemos tenido muchos puntos de unión y de identidad de ideas, y quiero poner como ejemplo el encuentro de las Telecomunicaciones de Santander, que organiza Ametic con Telefónica, que es un ejemplo de cómo hay que trabajar.
Un medio de comunicación informó de un cisma en Ametic, noticia que luego se demostró que era cierta. Existe algún problema con el mensajero
No creo que haya existido un cisma en la asociación. Un cisma sería que la junta directiva de Ametic no llegara a un acuerdo, con opiniones enfrentadas y eso provoque una ruptura. No ha sido el caso. No ha habido ninguna situación de diferencias graves, rupturas o enfrentamientos. Insisto, esto no ha sido un cisma. Todo se reduce a que un grupo de empresas muy importantes había decidido salir de la asociación. Es un tema grave, serio, pero no es un cisma.
¿Reprocha algo a las grandes empresas que le han boicoteado?
Prefiero pensar en positivo. Yo ahora pediría a las empresas críticas que vuelvan a la asociación, a su casa. Deben volver a Ametic y trabajar de forma leal y honesta es un proyecto común. Aquí hemos perdido todos. Es momento de tender puentes. No deben olvidar que este sector tiene empresas de todos los tamaños -grandes, medianas y pequeñas-, pero el verdadero tejido productivo está basado en pymes. No se puede ignorar esa realidad.
¿Preferiría que las 'telecos' no estuvieran en Ametic? ¿Comparte esa opinión de algunos asociados?
No. Eso es un error. Cuando las grandes operadoras montaron Redtel, hace 10 años, después se dieron cuenta de que no tenía sentido la existencia de dos voces que representaran al sector. Así nos pidieron que Redtel se integrara en Ametic. Yo apoyé esa integración. Hubo alguna oposición interna, de algunos que opinaban que esas empresas tan grandes tienen tendencia a querer imponer las cosas. Y yo entonces dije que no, que esto era lo mejor para todos y que la capacidad de llegada y de transmitir mensajes ante los gobiernos sería más poderosa si estábamos unidos. Siempre he apoyado esto y ha funcionado. Soy partidario de que sigan dentro de Ametic. Sería un grave error y crearía una factura de la que nadie resultaría beneficiado.
Entiendo que el futuro presidente tendrá que decantarse sobre el principio 'una empresa, un voto'...
Lo que pase a partir de ahora yo no lo sé. Si las empresas críticas plantean que se cambien de los estatutos, tendrán que proponerlo y votarse. Y deberán explicarlo muy bien porque es algo que ha funcionado 42 años. Pero no voy a influir ni entrar en ese debate. Creo que lo primero que tiene que hacer Ametic es estar unido y seguir siendo fuerte. Todas las diferencias se pueden arreglar. Insisto, el principio una empresa, un voto no ha creado conflictos. Son controversias que alguna persona se ha inventado, de alguien que no conoce Ametic, ni tampoco los valores y la cultura de la empresa en la que trabaja.
¿Cuándo habrá nuevo presidente?
Vamos a convocar junta directiva para la segunda semana de diciembre y en ella se acordará una nueva asamblea electoral. Pienso que será a finales de enero. Durante ese plazo queremos dar tiempo a que se formen una o varias candidaturas. Queremos que la gente se siente y que hablen, para que haya una o varias candidaturas representativas. Queremos que todo el mundo acepte al que gane, sea quien sea. Que se acepte el juego democrático de la mayoría. Espero que esta asociación tenga una nueva estructura antes del 31 de enero. Sería muy malo demorarlo más. Con el nuevo Gobierno y el nuevo ministerio de Agenda Digital, tenemos muchas cosas que decir al Ejecutivo.
¿Qué perfil debería tener el nuevo presidente de Ametic?
Creo que tiene que ser una persona de consenso, que venga del mundo de la empresa, que haya pagado nóminas y liderado proyectos empresariales. En Ametic hay buenos empresarios y empresarias y también excelentes gestores y ejecutivos... Me gustaría que el presidente de Ametic fuera una persona que comprendiera la complejidad del sector, alguien con una visión global, holística lo más completa posible. No es un mirlo blanco el que estoy pidiendo. Y si me pide ayuda, yo se la daré.
Pero ese candidato también debe contar con el apoyo de las empresas críticas con usted.
Sin duda, ése es el consenso al que me refería. Estas grandes empresas que han amenazado con su salida lo que deben hacer es retirar ese anuncio y ponerse a trabajar. Aquí no deben irse empresas, sino que tiene que venir más y ayudar a que entren más empresas.
¿Qué destacaría de sus cuatro años de gestión en Ametic?
Lo principal ha sido reestructuración de la asociación. Fruto de la fusión con Asimlec, me encontré con dos culturas distintas, con enormes diferencias en la forma de ver las cosas. Eso coincidió con un deterioro económico enorme. Hubo que poner orden, integrar las culturas, sanear las finanzas y una vez hecho lo anterior tratar de elevar el discurso de Ametic para que tuviera voz en el país y en la UE. Creo que eso se ha conseguido en una buena parte. Mi interlocución con el gobierno ha sido magnífica, fruto del trabajo realizado. Nuestra responsabilidad no es llevarnos bien con todo el mundo o ser ?seguidista?. Así, cuando hemos tenido que discrepar, se ha hecho. En mi discurso en el Encuentro de las Telecomunicaciones de Santander puse deberes al Gobierno, con tareas que ahora tienen plena vigencia. Otro logro importante de Ametic es que ha logrado despertar el interés de la pyme. Hemos facilitado su entrada, dándoles voz, canalizando sus inquietudes, ayudándoles en la transformación digital.