
La compañía Comuto Iberia, nombre comercial de la plataforma de coche compartido BlaBlaCar en España, ha afrontado en la Comunidad de Madrid su primera sanción en Europa por no tener "autorización" para ofrecer "un servicio de transporte público", según ha confirmado a Efe el director general de Transportes de la Comunidad de Madrid, Pablo Rodríguez Sardinero, tras la publicación de la noticia en ABC.
Sin embargo, la compañía ha explicado a través de un comunicado que "no ha recibido ninguna notificación de la incoación de ningún expediente en su contra", eso sí, reconoce ser "conocedora de la existencia del procedimiento administrativo abierto por la Dirección General de Transportes de la Comunidad de Madrid contra dos de sus usuarios el pasado mes de agosto".
Según informa el diario la Comunidad ha impuesto a la compañía dos sanciones muy graves por un valor total de 8.000 euros por "facilitar en nombre propio servicios de transporte público de viajeros sin ser previamente titular de una autorización". Además, le ha multado con una sanción grave por importe de 800 euros por "ofertar servicios de transporte público de viajeros sin disponer del título habilitante".
La Comunidad de Madrid interpreta con estas sanciones que la compañía ha vulnerado los artículos 140.2 y 141.7 de la Ley de ordenación de los transportes terrestres (LOTT), respectivamente.
BlaBlaCar por su parte ha defendido a través de un comunicado que "es una red social de viajes en coche compartido. Una plataforma tecnológica, que permite que dos usuarios contacten para realizar desplazamientos compartiendo gastos, sin ánimo de lucro. No es una empresa de transporte, ni los servicios que presta puedan considerarse una modalidad de transporte terrestre sujeta a la LOTT".
Expediente contra dos conductores
Por otro lado, Efe también ha informado que dos conductores de la empresa también han sido sancionados por la Comunidad de Madrid con 4.000 euros cada uno por no disponer "de ningún título habilitante para ejercer dicho transporte".
Por su parte, BlaBlaCar explica que los usuarios sancionados "presentaron en su día las correspondientes alegaciones, cumpliendo con los plazos establecidos, manifestando que no utilizaron la red social de coche compartido para realizar servicios de transporte público de viajeros con ánimo de lucro", además, la plataforma explica que a día de hoy "los expedientes administrativos contra los usuarios mencionados siguen pendientes de resolución, por lo que no se ha impuesto ninguna sanción".
Desde la red social defienden la actitud de sus conductores ya que "las aportaciones recibidas (...) no superaron nunca sus costes de desplazamiento, al ser inferiores a 14 céntimos de euro por kilómetro. Lejos, por ejemplo, de los 28,02 céntimos que establece el Observatorio del Transporte y la Logística en España ("OTLE"), dependiente del Ministerio de Fomento, que ha fijado en diversas ocasiones la estructura de costes del transporte privado"
De este modo, BlaBlaCar defiende que la actividad de sus usuarios (compartir los gastos de un viaje) sí está previsto en la LOTT, dentro de la figura de transporte privado particular. "El hecho de que particulares se unan a una red social para conocer gente con la que compartir los gastos de un viaje no es ilegal y tampoco es una actividad de transporte público de viajeros ni de intermediación a tal fin".
Inspecciones de la Comunidad
Todas estas sanciones se han producido después de las inspecciones efectuadas por parte de la Comunidad de Madrid a la actividad de Comuto Iberia, que entregó este verano al Gobierno regional la documentación requerida.
El director general de Transportes de la Comunidad de Madrid ha comentado que van a seguir inspeccionando a otros conductores y ha advertido a la compañía de que "tendrá que cambiar su metodología si quiere funcionar en España". "Hasta que España no cambie la ley, su manera de trabajar es ilegal", ha asegurado.
Por su parte, desde BlaBlaCar también han destacado que se "ha colaborado con las autoridades administrativas en todo momento y siempre ha cumplido escrupulosamente la ley vigente en todos los países en los que opera. Así, cabe reseñar que en España lleva operando más de 6 años y ni la compañía ni ninguno de sus más de 3.000.000 de usuarios ha recibido sanción alguna; de la misma forma que tampoco la ha recibido en ninguno de los otros 21 países en los que está presente".
Por ello, y ante la situación producida, BlaBlaCar ya ha solicitado una reunión con carácter urgente con las autoridades de transporte de la Comunidad de Madrid con objeto de aclarar esta situación.