
Algunas compañías mastodónticas tienen una especie de tradición en lo que a compras se refiere: hacerse con una empresa que no necesitan, y pagar por ella un precio que parece fuera del mercado. Eso es precisamente lo que algunos le reprochan ahora a Microsoft, que acaba de anunciar su intención de pagar nada menos que 26.200 millones de dólares por LinkedIn.
A los escépticos, los antecedentes no les faltan. Veamos por ejemplo el caso de Nokia, la histórica fabricante de teléfonos finlandesa por la que los de Redmond pagaron 7.200 millones en 2014... y que un año después tuvo que recibir una inyección de 7.600 millones. Otros nombres de sonados fracasos son Yammer (1.000 millones) o aQuantive (6.000 millones).
Quienes defienden que esta vez será diferente recuerdan que esas fueron todas decisiones de Steve Ballmer, chapado a la antigua y autocrático responsable de una estructura hiperjerarquizada. Pero hoy a los mandos está Satya Nadella, cuya percepción del mercado es mucho más abierta y que se ha lanzado a colaborar con sectores que hasta hace poco eran pura competencia.
El resumen de este enfoque lo ofrece Jeff Weiner, consejero delegado de LinkedIn que, además del obvio regocijo por la operación, explica que Microsoft va a dejar a LinkedIn que siga desarrollándose a su aire, en lugar de asfixiarlo con su integración en la maquinaria burocrática del gigante, e integrará a Bill Gates en la empresa con una fórmula de vinculación aún por especificar.
"Satya me convenció con la palabra 'independencia'. Su visión es operar LinkedIn como una entidad completamente independiente dentro de Microsoft, un modelo que ya ha sido usado con mucho éxito en YoUTube (que es de Google) o WhatsApp (de Facebook), explica Weiner, que asegura además que la red social profesional seguirá centrada en el networking, y Microsoft en la computación en la nube.
Nadella: "pisamos terreno inexplorado"
El propio Nadella ha confirmado este enfoque: "Vamos a pisar terreno inexplorado aquí. Le daremos a LinkedIn la capacidad de florecer, y suficiente espacio como pare respirar".
Pese a ello, los resultados financieros de LinkedIn pasarán a las cuentas consolidadas de la unidad de productividad y procesos de negocio de Microsoft.