
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha mostrado en las últimas horas su "respeto" a la sentencia de la Audiencia de Navarra que condena a nueve años de cárcel por delito continuado de abuso sexual a los cinco miembros de 'La Manada', a los que ha absuelto del delito de agresión sexual y delito contra la intimidad de los que habían sido acusados. Sin embargo, ha recordado que es un fallo recurrible y ha emplazado, tras las protestas ciudadanas con la decisión, a los grupos políticos a una reforma del Código Penal "si es conveniente".
En declaraciones a los periodistas en Córdoba, el ministro ha afirmado que "hay que revisar la legislación si en algún caso se identifica que hay alguna duda en cuanto a la aplicación de los tipos penales", tras señalar "si es conveniente promover una revisión, reforma o reflexión sobre el Código Penal, que en estos delitos está tipificado en el año 1995", aunque ha apostillado que "hay algunos que dicen que no hay que legislar en caliente".
Así, cuestionado sobre la necesidad de reforma del Código Penal, Catalá ha insistido en que "hay que leerse la sentencia", porque cree que "la clave es la consideración de si ha existido violencia o intimidación o no", de modo que "nosotros no podemos entrar a la valoración de la prueba", para lo cual se ha remitido a los jueces y al tribunal que "hay que respetar" y que "es independiente, profesional y cualificado", tras "dedicarle muchas horas a estudiar un caso tremendamente difícil, con gran impacto en la sociedad y la opinión pública".
Por ello, ve "muy conveniente que se expliquen bien los términos de la sentencia para poder entender las circunstancias", al tiempo que ha declarado que "si es precisa una reforma legislativa, nosotros estaremos dispuestos a sentarnos con los grupos para promoverla, si es lo conveniente en este caso".
Aún con todo, ha enfatizado que "lo que hay que hacer es aclarar, informar e establecer bien claro que hay una sanción alta por el delito cometido, de nueve años", y por lo tanto, ha puntualizado, "los recursos podrán en su caso fortalecer esta decisión o la que consideren los tribunales superiores".
Entretanto, el ministro ha subrayado su "respeto y acatamiento a las decisiones del poder judicial, independiente", a lo que ha agregado que "es que es una sentencia que tiene recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Navarra y luego podrá ser objeto de casación ante el Tribunal Supremo", por lo que "no está dicha la última palabra", ha apostillado.
No obstante, Catalá ha manifiesto que "la sentencia reconoce que se ha cometido un delito, que hay una víctima, una persona sobre la que se ha atentado contra su integridad sexual", a la vez que ha apuntado que "se está en una cuestión de si ha habido violencia e intimidación o no la ha habido". Estos son "aspectos de carácter jurídico y probatorio", ha precisado el ministro.
Al respecto, ha comentado que "la sentencia es muy extensa, el tribunal le ha dedicado muchas horas a las pruebas, las testificales y las audiencias", de forma que "ha hecho un trabajo conforme a la información de la que ha podido disponer", pero ha insistido en que "hay un delito sobre una persona que ha visto violentada su indemnidad sexual y es una cuestión de apreciación del nivel de la violencia y la intimidación".
Cospedal pide "una reflexión"
Por su parte, la ministra de Defensa y secretaria General del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, ha afirmado este viernes que tras leer la sentencia sobre 'La Manada', que no le gusta, "es un momento para hacer una reflexión" sobre el modo en que está tipificada la violencia sexual en España.
"Quizá haya que empezar a pensarse cambiar las calificaciones de los tipos o como está configurado en nuestro derecho la agresión sexual y el abuso sexual, qué se considera violación y qué no. Es un momento para hacer una reflexión y quizá podríamos hacerlo", ha comentado en declaraciones a la Cope.
Cospedal, que ha leído la sentencia aunque "demasiado rápidamente", ha afirmado que "como persona, como ciudadana y como mujer" le "cuesta asumir el contenido" del fallo, que condena a los cinco a 9 años de prisión por un delito de abuso sexual continuado, que no de agresión sexual porque entiende que no se dieron los requisitos de intimidación y violencia que exige para ello el Código Penal.
"Es condenable, humanamente, de todo punto de vista", ha dicho sobre la sentencia, para incidir en que los hechos probados describen "una salvajada en la que ninguna mujer está a gusto" y en la que "no se puede decir que una mujer no se sienta intimidada".