
Los procedimientos judiciales en marcha contra los líderes independentistas catalanes han llevado a un nuevo cambio en los planes de Carles Puigdemont para volver a presidir la Generalitat. Tras la victoria de Cs en las elecciones del 21 de diciembre, el cabeza de lista de Junts per Catalunya, que quedó en segunda posición por delante de ERC contra pronóstico, rehusó volver a Cataluña pese a la mayoría absoluta de las formaciones independentistas. Su repetida afirmación de que volvería si ganaba los comicios se tornó ayer en que retornará si es investido president telemáticamente. Puigdemont convoca este viernes en Bruselas a los diputados de JuntsxCat.
Y es que él relataba sus planes hasta ahora como que sería detenido nada más salir del Parlament tras ser elegido presidente, pero la realidad es que sería interceptado en cuanto pisase suelo español. Su última esperanza para mantener su objetivo de volver al frente de la Generalitat y restituir el Govern anterior a la aplicación del 155 es conseguir que la Mesa del Parlament fuerce la interpretación del reglamento para permitir su investidura a distancia.
Sin embargo, PP y Cs avisaron ayer de que recurrirán por ilegal cualquier intento de voto telemático, que también rechaza el PSC, y ERC da largas sobre su postura sobre esta posilibidad, aduciendo que la interpretación del reglamento corresponde a los letrados del Parlament.
En principio, la normativa de la cámara catalana solo explicita casos de baja por maternidad y enfermedad, pero entre JxCat y ERC tienen a ocho diputados encarcelados o huidos a Bruselas y, si no pueden votar, los independentistas perderían la mayoría la próxima semana, ya que el día 17 se debe constituir el Parlament y su Mesa, por lo que esta semana se sucederán las reuniones entre partidos para buscar una mayoría en la que la coalición de Podemos y los comuns puede ser clave.
Para conservar la mayoría absoluta secesionista, el portavoz de Demòcrates y diputado electo por ERC, Antoni Castellà, propuso ayer que los cuatro exconsellers que están en Bélgica -Clara Ponsatí, Lluís Puig, Meritxell Serret y Toni Comín- renuncien al acta de diputado a cambio de que se les garantice un puesto en el próximo Govern.
Mientras, desde el PP y el PSC invitaron de nuevo a Inés Arrimadas, ganadora el 21D como cabeza de lista de C's, a retomar la iniciativa política y explorar las posibilidades de un gobierno catalán constitucionalista.