
La semana pasada la renta fija y variable de los países periféricos sufrieron ante la expectativa de que se formase un Gobierno euroescéptico en Italia. A esta posibilidad se le unió una moción de censura en España que aumentó las turbulencias. La renuncia de Conte a formar Gobierno ha provocado un giro de los acontecimientos, pero lo que no cambia para el inversor es un escenario de riesgo e incertidumbre.
Las bolsas y el euro arrancaron el lunes con fuerza, pero se han ido deshinchando al tiempo que la renta fija pasaba de las compras a las ventas toda vez que la visibilidad sobre el futuro del país es limitada. "Es probable que haya unas nuevas elecciones en otoño, de las cuáles probablemente La Liga Norte -el partido de populista de derechas- saldrá aún más fuerte. El rápido incremento del déficit en el país y las tensiones resultantes en la eurozona solo han sido pospuestas", explican desde Commerzbank.
Moody's reaccionó el fin de semana cambiando la perspectiva sobre la deuda italiana a negativa durante el fin de semana, lo que hace probable una bajada de rating. El mercado no ha respondido con virulencia a esta amenaza toda vez que una bajada de calificación aún dejaría la deuda del país por encima del bono basura y era algo descontado. Con todo, el escenario que afronta el inversor parece complicado con varias amenazas en el horizonte.
1.- La volatilidad será alta
"Hasta las elecciones, la volatilidad del mercado será alta y esta semana se producirá el primer test real para la deuda del país, ya que el Tesoro del país colocará deuda por más de 10.000 millones durante la semana", explican desde Danske Bank. Durante los últimos días el interés de bono italiano se ha disparado en cerca de 60 puntos básicos, hasta la zona del 2,5%.
Mientras el rendimiento de la deuda del país transalpino se ha disparado, los inversores se han refugiado en el bund, lo que ha provocado que la prima de riesgo se haya elevado hasta los 206 puntos básicos.
2.- Una amenaza para el euro
Desde el mes de noviembre del pasado año el euro se había fortalecido sustancialmente en medio de uno de los mejores momentos de crecimiento de la región de los últimos años. Sin embargo, la crisis política en Italia ha aumentado la presión sobre la divisa común que cotiza en zona de mínimos del año, por debajo de los 1,17 dólares.
Ahora la perspectiva de unas elecciones en las que los movimientos contrarios a la UE se hagan aún más fuertes eleva la presión sobre la moneda. "Existe la posibilidad de que la campaña electoral se convierta en un referéndum sobre el euro", aseguran desde Société Générale.
Una de las palancas que puede provocar mayores caídas en la moneda única es que los especuladores cierren las elevadas posiciones alcistas que tienen sobre la divisa. Aunque han caído desde máximos históricos, los hedge fund tienen apostados 16.200 millones de dólares al alza.
3.- 100.000 millones de deuda que emitir
Según los cálculos de Bank of America Merrill Lynch, Roma todavía tiene que colocar 100.000 millones de euros en el mercado este año. Una tarea que se complica toda vez que el interés exigido por el mercado se ha disparado en solo unas sesiones y que se podría complicar aún más teniendo en cuenta la amenaza de un aumento del gasto.
"Los inversores necesitan ser valientes si quieren tener en cartera su deuda italiana con una prima de 200 puntos básicos sobre el bono alemán teniendo en cuenta los serios retos que se avecinan en otoño, cuando pueden aparecer los miedos por recuperar el capital", señalan en Société Générale.