
El candidato a primer ministro de la coalición La Liga-Movimiento 5 Estrellas, Giuseppe Conte, ha anunciado su renuncia a formar Gobierno en Italia pese al anterior encargo del presidente, Sergio Mattarella.
"He dado lo máximo", ha asegurado Conte tras anunciar su renuncia, según recoge la prensa italiana. Esta renuncia acerca la posibilidad de que se repitan las elecciones legislativas italianas este mismo año.
Conte recibió el encargo de Mattarella para formar Gobierno el pasado 23 de mayo, después del acuerdo programático de gobierno alcanzado por el Movimiento 5 Estrellas y La Liga. Sin embargo, este domingo el presidente Mattarella ha rechazado a Paolo Savona, un reconocido euroescéptico, como candidato a ministro de Economía, según han informado los dos partidos de la coalición de gobierno.
"Si estamos en un vallado y tenemos cadenas y no podemos poner a un ministro que no es bueno para Berlín, no es bueno", argumenta el líder de la Liga. "Si un ministro no es querido en Berlín, significa que es el ministro adecuado (...). En Italia deciden los italianos", ha apostillado.
Mattarella había convocado a Conte a la sede de la Presidencia, el Palacio del Quirinale,a una reunión en la que el candidato presentaría al presidente su lista de ministros. Luigi Di Maio, líder del Movimiento 5 Estrellas, mantuvo este mismo domingo un encuentro informal con Mattarella para intentar resolver el conflicto, según fuentes presidenciales, pero Mattarella ya lo había advertido durante semanas: el presidente de la República no es un mero notario que se limita a firmar lo que le ponen encima de la mesa.
Menos aún si se trata del nombre de un economista que defiende la posibilidad de sacar de la moneda única a uno de los países fundadores de la Unión Europea. Pero las presiones fueron creciendo hasta convertirse en una extorsión en apoyo de Savona. Es decir, bloqueo y convocatoria de elecciones. Un escenario donde todas las encuestas otorgan una importantísimo aumento de votos de La Liga de Matteo Salvini.
Savona fue ministro de Industria a principios de 1990 y ha ocupado cargos de responsabilidad en el Banco de Italia, pero ha sido una de las voces más críticas con el euro y la UE. "Quiero una Europa diferente, más fuerte, pero más igualitaria", declaró.