Sólo queda una semana para que el Fondo de Adquisición de Activos Financieros (FAAF), el vehículo mediante el que el Gobierno comprará títulos a los bancos y cajas de ahorros, comience a ejecutar la función para la que ha sido constituido. De ahí que tanto el Banco de España como el Tesoro Público estén realizando movimientos cada vez más concretos para que todo esté preparado para cuando llegue el día D.
El órgano supervisor ha solicitado a todas las entidades financieras que se inscriban en el registro creado para recoger qué firmas quieren acudir a las subastas de compras de títulos. De este modo, quiere impedir uno de los principales temores existentes en el sector, consistente en la posibilidad de que se produzcan filtraciones de los bancos y cajas que van a recurrir al fondo y que eso estigmatice a dichas entidades.
Fuentes del sector afirman que en las reuniones mantenidas con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, los presidentes de las principales entidades españolas han insistido precisamente en este aspecto. De ese modo, pretenden que no se genere una fuga de clientes desde las firmas que comuniquen que se personarán en las subastas.
En este sentido, hoy, a las cinco de la tarde, concluye el plazo para acudir a las primeras compras, fijadas para el 20 de noviembre y el 11 de diciembre. Entre ambas operaciones, el FAAF adjudicará 5.000 millones de euros, aunque su dotación total asciende a 30.000 millones, que son ampliables hasta 50.000 millones.
Más de lo previsto
Adicionalmente, el Tesoro Público dio ayer el primer paso para financiar el Fondo. Lo hizo a través de la primera de las tres jornadas de subastas extraordinarias que va a llevar a cabo hasta mediados de enero de 2009. Más en concreto, llevó a cabo dos lanzamientos, mediante las que emitió, por un lado, letras a seis meses y, por otro, bonos del Estado a dos años. Entre ambas, consiguió captar 4.419 millones de euros, una cantidad que superó los objetivos más elevado manifestados previamente por el Tesoro, establecidos en 4.200 millones de euros.
En letras a seis meses, cuyo vencimiento tendrá lugar el 22 de mayo de 2009, colocó un total de 1.619 millones de euros a un tipo marginal del 2,6%, frente a los 2.853 millones de euros que demandaron los inversores. En este sentido, el Tesoro había previsto emitir entre 1.300 y 1.800 millones de euros, una horquilla entre la que finalmente se movió.
En bonos del Estado a dos años, con vencimiento el 31 de enero 2010, adjudicó un total de 2.800 millones de euros, una cifra batida ampliamente por los 6.404 millones solicitados por los inversores. El tipo de interés marginal se situó en el 2,704%. En este caso, lanzó al mercado un montante más alto al mencionado en su objetivo inicial, cifrado entre 1.800 y 2.400 millones de euros.
Ambas operaciones contaron con una demanda mayor a la cantidad que estaba previsto emitir, una comportamiento que pone de relieve el gancho con el que cuentan ahora los títulos lanzados por el Tesoro, en los que los ahorradores encuentran una alternativa de inversión, sino muy rentable, al menos sí segura. Así, la demanda superó en 1,7 veces la cantidad que fue emitida en letras, proporción que aumenta hasta las 2,29 veces en el caso de los bonos a dos años. Y este hecho fue, precisamente, el que permitió que las emisiones terminaran captando más dinero del estimado.
De este modo, el Tesoro Público saldó con éxito la primera de tres jornadas de subastas extraordinarias que va a realizar para financiar el FAAF, tal como anunció el pasado 30 de octubre. La próxima tendrá lugar el miércoles 10 de diciembre, fecha en la que se colocarán letras a 6 meses con vencimiento 19 de junio de 2009 y bonos a dos años, con un cupón del 3,25 por ciento y vencimiento 30 de julio de 2010.
Y la última prevista hasta la fecha tendrá lugar el miércoles 14 de enero de 2009, cuando se subastarán de nuevo letras a 6 meses -con vencimiento 17 de julio de 2009-. Tal como ocurrió con las subastas celebradas ayer, el Tesoro Público anunciará en los días previos a los lanzamientos los objetivos de financiación que perseguirá con estas operaciones.
Miembro de AIAF
Además, el mercado español de renta fija (AIAF) concedió ayer la condición de miembro de esta plataforma al Fondo de Adquisición de Activos Financieros. Fuentes de AIAF precisaron que aunque esta medida no constituía una condición indispensable para que el FAAF pudiera operar, resultaba aconsejable ya que los títulos que va a comprar sí deben cotizar en un mercado oficial y regulado. Es decir, una obligatoriedad que en España conduce directamente a AIAF, de ahí la decisión adoptada ayer.
Las entidades lo estudian