
La bolsa española a lo largo de los últimos años ha dado a partes iguales tantas alegrías como disgustos. Según datos recogidos por Bloomberg, prácticamente la mitad de las cotizadas ha conseguido una evolución positiva desde su debut en el mercado y la otra mitad aún cotiza por debajo del precio de su salida a bolsa. Reyal, suspendida desde 2013, Codere y Bankia son algunos ejemplos del calvario bursátil.
La inmobiliaria, que camina firmemente hacia su liquidación, debutó en bolsa en 2007 a un precio de 6,5 euros y se despidió del parqué a 0,124 euros. La compañía consiguió captar en su salida al mercado más de 860 millones de euros, aunque de poco le sirvió. La crisis de la construcción llevó a la firma a solicitar el concurso voluntario de acreedores con una deuda acumulada de 3.600 millones de euros.
En paralelo a su escabroso paso por la bolsa, el desmesurado pasivo provocó la entrada en escena de sus bancos acreedores que hasta el último momento intentaron reflotar a Reyal. A pesar de ello, las últimas informaciones apuntan a que la compañía está abocada a protagonizar la segunda mayor quiebra de la historia de España tras Martinsa Fadesa y todo parece indicar que la propuesta de convenio que presentó la compañía para evitar la liquidación no ha recibido el apoyo necesario por parte de sus acreedores.
Al margen de sector inmobiliario, la crisis económica ha provocado grandes estragos en Codere. Además del golpe a sus cuentas, la caída del consumo ha llevado a la firma de apuestas a cotizar muy por debajo de su precio de debut bursátil. En particular, sus acciones dieron el salto al parqué en 2007 con un precio de 21 euros y hoy se mueve en torno a los 0,4 euros.
Bankia es el caso más delicado de este asunto puesto que su andadura en el parqué ya empezó con mal pie. Además de que su salida a bolsa fue fraudulenta, la entidad ha ido acumulando problemas financieros con sus respectivas dudas en el mercado. Sus acciones, cuyo importe de la OPV tuvo que ser devuelto a los inversores, debutaron a un precio de 3,75 euros en 2011, una cifra demasiado inflada si se compara con el euro raspado de ahora.
Así las cosas, los inversores que acudieron a la salida a bolsa de Bankia han perdido más de un 97%. Hay que tener en cuenta que en marzo de 2013 el banco aplicó un contrasplit de 100 acciones a uno cuando sus acciones valían pocos céntimos. A partir del próximo 5 de junio, la entidad agrupará sus títulos en una proporción de cuatro actuales por uno nuevo.
La bolsa tampoco ha sido un campo de rosas para GAM, Abengoa, Renta Corporación, Vocento, Solaria, Realia, CAM, Adolfo Domínguez, eDreams, Clínica Baviera o Funespaña. Ninguna de ellas ha conseguido revertir la tendencia bajista de los últimos años.