
La marca de pulseras de actividad física Fitbit ha recortado su previsión de crecimiento por una menor demanda esperada de sus productos. La compañía espera una pérdida ajustada entre 0,51 y 0,56 dólares por acción, frente a la previsión de ganancias de entre 0,14 y 0,18 dólares por acción que barajaba en su anterior informe. El recorte de ingresos ha caído desde el crecimiento del 26% al 17% en la nueva previsión. Para reducir gastos, la compañía ha indicado en una nota de prensa que eliminará 110 empleos, 6% de su plantilla.
La compañía espera que sus ingresos del cuarto trimestre se encuentren entre los 572 y 580 millones de dólares, en comparación con los 725 y 750 millones entre los que esperaba cerrar los meses de octubre a diciembre. Fitbit podría haber vendido un total de 6,5 millones de dispositivos en este último trimestre.
De cara al 2017, Fitbit espera que sus resultados se "estabilicen" en la segunda mitad del año, con unas pérdidas ajustadas de entre 22 y 44 centavos de dólar por acción sobre unos ingresos que podrían superar los 1.500 millones de dólares. La compañía dará sus resultados completos el próximo 22 de febero.
Cabe destacar que las acciones de la compañía han cedido más de un 50% en los últimos tres meses y más de un 80% desde que saliera a bolsa en junio de 2015.
El profit warning de Fitbit es una muestra más de los problemas para crecer del mercado de wearables. De hecho, en diciembre cerró Peeble, uno de sus principales competidores y que precisamente fue adquirido por Fitbit, aunque solo se quedó sus activos de softwarem descartando su inventario.
Otra empresa del sector que está en problemas es GoPro. El fabricante de cámaras de acción anunció a finales de noviembre del año pasado que despediría al 15% de su plantilla.