
Jornada de locura en los mercados. Si a primera hora los inversores se decantaban por vender la deuda periférica, provocando que la rentabilidad del bono español escalara hasta el 1,83%, y por refugiarse en el bund alemán, cuyo rendimiento pudo bajar hasta el 0,19%, ahora escapan de prácticamente toda la deuda.
Ninguno se libra de las ventas de los inversores. El interés exigido al papel español a una década, a pesar de que había conseguido relajarse hasta el 1,72%, ha vuelto a escalar hasta el 1,75%, y está a punto de generar pérdidas ya en el bolsillo de los inversores, que ahora ya apenas ganan un 0,13% desde que comenzara el actual ejercicio.
Por su parte, el rendimiento del bund alemán, que había llegado a caer en la apertura hasta el 0,19%, ha repuntado hasta el entorno del 0,24%.
Como resultado de ello, la prima de riesgo, que mide la diferencia entre la rentabilidad del bono español a diez años con la de su homólogo alemán, se sitúa prácticamente en el mismo nivel que ayer, los 153 puntos básicos. Y eso que a primera hora había llegado a bajar 149 puntos, por las compras de bonos alemanes.
Los seguros contra el riesgo de impago (Credit Default Swaps o CDS, por sus siglas en inglés) están subiendo. Miden el riesgo de que los deudores no hagan frente a sus pagos comprometidos, por lo que los acreedores los compran para cubrirse frente a posibles riesgos de impago. Cuanto mayor es la prima que se paga por estos seguros, mayor es el riesgo percibido.
En ese sentido, el CDS que más está encareciéndose hoy es el de la deuda griega, que escala 53 puntos hasta los 1.704 dólares. Esto quiere decir que para garantizar una inversión de 10 millones de dólares los accionistas tienen que pagar 1.704 dólares. Por su parte, los seguros de la deuda española o italiana apenas suben dos puntos con respecto a ayer.
También en las bolsas
Lo mismo ha sucedido en la renta variable. Poco le han durado las ganancias al Ibex 35, que arrancaba la jornada con un ligero ascenso del 0,5% pero rápidamente borraba las ganancias de un plumazo. El resto de bolsas en Europa también han seguido la misma tendencia.
Importantes caídas, también, en la renta variable japonesa en una sesión en la que el Nikkei ha perdido de un plumazo soportes de corto plazo que presentaba en los 16.550 puntos y ha ido a buscar la zona de mínimos del año y entorno de gran soporte de los 16.000 puntos.