
Salir a bolsa como una vía para financiar el crecimiento de la compañía a través de adquisiciones o apertura de nuevos negocios. Esa es una de las ideas que está barajando el gigante del aceite catalán Borges. Propiedad de la familia Pont, Borges International Group alcanzó el pasado ejercicio una cifra de negocio de 621 millones de euros, lo que supuso un crecimiento del 4% respecto al año anterior.
Con un beneficio después de impuestos de 13 millones, la misma cifra que el año pasado, en la empresa explican, no obstante, que esta no es la primera vez que la salida a bolsa está sobre la mesa. La idea ahora de los Pont es que con el tamaño alcanzado el mercado bursátil puede ser atractivo.
Una portavoz de la empresa reconoció ayer que "Borges International Group siempre está buscando alternativas de crecimiento inorgánico y formas de financiarlo", admitiendo que "la salida a bolsa es una de las muchas alternativas existentes". Esta portavoz insiste, sin embargo, en que por ahora no hay ninguna decisión tomada. "De momento no hay ninguna previsión al respecto y la decisión se tomará si hay un proyecto que merezca la pena", asegura.
Posible segregación
Otras fuentes consultadas por este periódico insisten, sin embargo, en que se está trabajando en varios escenarios posibles, sin descartar incluso la posibilidad de segregar una parte sólo del negocio para que diera el salto al parqué. En cualquier caso, la intención de la familia Pont pasa por conservar en todo momento la mayoría en el capital, independientemente de lo que hagan.
Borges International Group exporta ya el 77% de sus ventas, experimentando fuertes crecimientos en mercados como Rusia, Brasil, India o China, de reciente implantación y por los que la compañía está realizando una fuerte apuesta y en los que ya tiene trabajando 147 empleados propios. Con una plantilla de 1.034 trabajadores, Borges está presente en un total de 110 países en los cinco continentes y es la marca de aceite con mayor distribución en el mundo, uno de los cinco primeros operadores mundiales de nueces y el primer exportador nacional de frutos secos. Actualmente, la compañía que preside Ramón Pont está presente en toda la cadena de producción.
Cuenta con plantaciones propias, más de 1.500 hectáreas en California (Estados Unidos), Extremadura y Granada, así como doce factorías. Fuera de España, tiene filiales propias en Estados Unidos (tres empresas en el país norteamericano), Brasil, Francia, Polonia, Rusia, India, China, Túnez, Marruecos y Egipto. En el último año la empresa ha diversificado además su cartera de productos mediterráneos, lanzando por ejemplo a nivel internacional pasta italiana y salsas de alta calidad.
Entre los distintos proyectos en marcha, la compañía se ha fijado como meta el crecimiento en los próximos ejercicios en países del sudeste asiático. Según el consejero delegado de Borges , Josep Pont, éste seria el caso de Camboya, mercado en el está siendo "enormemente proactiva" en la búsqueda de oportunidades