Fernando Bernad y Beltrán Parages, ex gestor y ex director comercial de Bestinver, han tardado menos de un año en perfilar su nuevo proyecto: una gestora especializada en renta variable registrada en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) con el nombre de azValor. Eso sí, arranca sin Álvaro Guzmán y sobre todo sin Francisco García Paramés, la piedra angular del que fue el equipo de gestión más afamado de la historia española.
Con oficina en Madrid, azValor tendrá una gama de productos muy focalizada a la renta variable, un activo que están acostumbrados a gestionar. Tendrán dos fondos: uno ibérico y otro internacional. "Seguiremos la misma filosofía de siempre, generar rentabilidades a largo plazo tratando de encontrar buenas compañías a precios razonables", explican Bernad y Parages, socios fundadores de la nueva gestora.
No obstante, su experiencia les ha llevado a incluir también un fondo monetario en su catálogo: "También tendremos un producto que técnicamente es de renta fija mixta, un monetario con algo de renta variable. Es un punto que nos pareció que los inversores conservadores demandaban en Bestinver, un producto complementario pero al que no vamos a dar mucha cancha", justifican.
En principo, calculan que sus fondos estarán disponibles para la venta en España en un mes, ya que acaban de ser registrados en la CNMV. Éstos, además, tendrán comisión de reembolso, es decir, que el cliente tendrá que pagar un porcentaje fijado en caso de querer recuperar su dinero. No obstante, definirán sus productos en el folleto como fondos de autor, lo que significa que el cambio del gestor relevante será considerado como un cambio sustancial de la política de inversión del producto, requiriendo la publicación de un hecho relevante en la CNMV y dando derecho de separación al partícipe, esto es, a salirse del fondo sin tener que pagar nada a la gestora.
Al contrario de lo que han hecho otras gestoras españolas, descartan iniciar una campaña de marketing con comisiones ventajosas a sus primeros partícipes.
¿Rival de la firma de Acciona?
La idea de que el gestor gallego pueda formar parte en un futuro de este proyecto dota de un atractivo extra a azValor y, de hecho, podría hacer que muchos de sus antiguos fieles en Bestinver decidan seguir sus pasos hasta la nueva gestora, aunque sus dos socios fundadores aseguran que no están captando clientes de su antigua casa: "Como la salida de Bestinver no fue silenciosa que digamos, nos ha seguido mucha gente, no solo los que están en Bestinver. Sienten que donde vayamos nos tienen que seguir", explican.
Sin embargo, lo cierto es que desde que Beltrán de la Lastra se incorporase a la firma como director de inversiones, sus fondos cosechan buenas rentabilidades y han batido al mercado. Bestinver Bolsa, su fondo de bolsa española, sube un 1,24% en 2015 frente a una caída del 9% del Ibex Total Return (que incluye los dividendos). Y Bestinver Internacional, su mayor fondo de renta variable europea, sube un 4,29% frente al 0,6% del EuroStoxx 50 con dividendos.
La puesta en marcha de un nuevo proyecto era ya un secreto a voces para el mercado. Y es que a la desordenada salida de Bestinver de Francisco García Paramés, el 23 de septiembre del año pasado, le sucedieron otras en su círculo más próximo. Primero la de Beltrán Parages, su director comercial, que fue suspendido de empleo y sueldo solo unos días más tarde que el gestor gallego. Y apenas cuatro meses después, en enero de 2015, las de Fernando Bernad y Álvaro Guzmán, los otros dos miembros del tridente de gestores de la gestora propiedad de Acciona.
Eso sí, Guzmán tenía, al igual que el Warren Buffet español, una cláusula de no competencia que le obliga a mantenerse fuera del mercado hasta finales del mes de octubre; si bien en el caso de Paramés expira en septiembre de 2016. Aunque ninguno de ellos forma parte, por ahora, del proyecto: "A nosotros nos encantaría que vinieran, pero no estamos vendiendo que vayan a hacerlo", justifican Bernad y Parages. "Primero intentaremos convencerles como inversores", añaden.
Paramés seguirá siendo "un pintor que no puede vender sus cuadros", afincado en Londres hasta que pueda volver a gestionar fondos en septiembre de 2016. Nada más lejos de la realidad, fuentes cercanas a su entorno aseguran que a día de hoy "continúa analizando los mercados, estudiando empresas y viendo las oportunidades de inversión que se están generando, con el fin de situarse de cara a su futura vuelta al mundo de la gestión de fondos".
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