
La agencia de calificación de riesgo Standard & Poors ha recortado el precio objetivo de los dos grandes bancos españoles, Santander, BBVA, y de uno de los medianos, Banco Popular, porque espera un deterioro de sus activos más rápido del que había previsto en un principio. Por su parte, Moody's ha puesto en revisión negativa un total de trece emisiones de deuda de varias entidades financieras. BBVA también quiere poner una pica en el Reino Unido: podría comprar HBOS.
En concreto, para la entidad financiera presidida por Emilio Botín el recorte de los analistas de la división de renta variable de la agencia ha sido de 2 euros, desde los 16 anteriores a los 14 euros actuales. Sin embargo, S&P sigue manteniendo la recomendación de "fuerte compra" para Santander (SAN.MC), que la pasada semana anunció un acuerdo de compra con el británico Alliance & Leicester.
Por su parte, BBVA (BBVA.MC), envuelto hoy en rumores acerca de su posible interés por adquirir el banco escocés HBOS, ha visto recortado su precio objetivo a doce meses de 18 a 15 euros. También para la entidad comandada por Francisco González S&P mantiene la recomendación de "comprar".
La mayor rebaja se la ha llevado Banco Popular (POP.MC), para la que los analistas de la agencia de calificación sitúan el precio objetivo en 8,40 euros desde los 12 anteriores, y recomiendan "mantener".
Desde el área de renta variable de S&P consideran que los inversores son ahora más reacios a tener valores bancarios en sus carteras, por lo que exigen un mayor rendimiento de estos títulos
Deterioro de activos
Los expertor de Standard & Poor's señalan en su informe que esperan un deterioro más rápido en la calidad de los activos de las entidades financieras españolas del previsto en un principio. Según explican, esto se deberá a la desaceleración económica y al consiguiente aumento del desempleo y la morosidad.
A la espera de que publiquen sus resultados trimestrales, S&P detaca que será de especial importancia que reflejen su capacidad de estos tres bancos para contener sus gasto, pese al entorno de ralentización, teniendo en cuenta que Latinoamérica sigue cumpliendo las expectativas.
Asimismo, S&P indica que el mercado se fijará en la actualización de la exposición al sector inmobiliario, ya que esto mejoraría la visibilidad de los beneficios y limitaría la incertidumbre sobre posibles pérdidas.
Deuda en duda
Por su parte, Moody's ha puesto en revisión con implicaciones negativas los ratings de las últimas emisiones de deuda de la banca española respaldadas por hipotecas.
La agencia señala que se trata de un total de trece emisiones de bonos de titulización de activos hipotecarios colocados por diversos bancos y cajas de ahorro, entre los que figuran Santander, BBVA, Caixa Catalunya y Bancaja, y cuyo volumen total asciende a 7.000 millones de euros.
Así, Moody's espera que el rating de estas emisiones descienda una categoría, "aunque algunos tramos podrían verse afectados por (un recorte de) dos grados". Sin embargo, los analistas no espera en este momento que esta revisión afecte a "cualquier otro rating".