
El seguro contra el riesgo de impago (CDS) de España se encuentra en niveles similares a los de países como Bulgaria, Lituania, Rumanía o Croacia, a los que la agencia concede una nota crediticia de 'Baa1' y 'Baa3', es decir, notablemente inferior al 'Aa2' en el que Moody's ha situado hoy el 'rating' español.
En concreto, el seguro para protegerse de un posible impago de España repunta hoy hasta los 257 puntos básicos, el decimotercero más alto del mundo. Esta cota le posiciona por encima de los 234 puntos básicos de Bulgaria y de los 245 puntos básicos de Lituania, a los que Moody's da una calificación de Baa3 y Baa1, respectivamente; y por debajo de los 277 puntos básicos de Rumanía, de los 282 puntos básicos de Croacia y de los 303 puntos básicos de Hungría, todos ellos con una nota de Baa3.
Por tanto, aunque oficialmente la calificación concedida hoy por Moody's a la deuda española sigue siendo alta, puesto que es la tercera mejor dentro de su escala, el ranking oficioso del mercado sitúa el grado de solvencia de España en una categoría inferior, puesto que el CDS se encuentra junto a países a los que la agencia otorga su octava y su décima calificación más altas.
Azote de los periféricos
Con la decisión anunciada hoy, Moody's, una de las tres principales agencias de calificación de riesgos junto con Standard & Poor's y Fitch, se está erigiendo así en el azote de los países periféricos de la eurozona esta semana. Su protagonismo comenzó el lunes, jornada en la que rebajó el rating de Grecia en tres escalones, desde Ba1 hasta B1, al tiempo que advirtió del riesgo de que el país heleno no pueda afrontar el pago de su deuda.