
La Agencia Internacional de la Energía ha vuelto a destacar que "2017 podría ser otro año en el que la oferta crezca de forma implacable, algo similar a lo sucedido en 2016", en su informe mensual de noviembre. Desde este organismo se avisa de que esta situación combinada con una demanda tibia podría tener efectos sobre los precios del crudo.
De este modo, la agencia, que reúne a los grandes países consumidores de energía miembros de la OCDE, se centró en este informe en la futura reunión del día 30 que ha convocado en Viena la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), con intención de fijar un techo a su extracción de crudo. Un acuerdo entre la OPEP y otros grandes productores parece cada vez más lejos, o al menos, los datos de producción se alejan cada mes más y más del techo de producción que quería establecer el cártel.
Y a ese respecto, su principal comentario es que para cumplir los objetivos avanzados de un máximo de producción en una horquilla entre 32,5 y 33 millones de barriles diarios, la OPEP tendría que ponerse de acuerdo sobre "recortes significativos" a la vista de que estima que en octubre el cártel petrolero produjo una cantidad récord de 33,83 millones de barriles diarios.
Todos bombean más crudo
En octubre, la OPEP bombeó 230.000 barriles diarios más que en septiembre, sobre todo por la recuperación de la actividad en Nigeria y Libia, así como por Irak, que alcanzó un nuevo máximo histórico (4,60 millones de barriles), pero también porque Irán sigue acercándose a los niveles que tenía antes del periodo de las sanciones internacionales (3,75 millones).
Además, fuera del cártel también hubo un incremento del resto de los productores en 485.000 barriles diarios en octubre hasta 57 millones, y eso en particular gracias a yacimientos en el Mar del Norte, a Rusia y a Kazajistán.
Parece que todos los productores de crudo, salvo la OPEP, tienen previsto incrementar su producción durante los próximos meses, lo que pone en serio peligro la nueva estrategia del cártel petrolero. Los esfuerzos de la OPEP podrían ser en vano si el resto de productores llenan el hueco que va a dejar este conjunto de países exportadores.