
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, confirmó hoy que la entidad monetaria comprará deuda soberana en el mercado secundario. La institución también ha decidido mantener estables los tipos de interés del euro en su mínimo histórico del 0,75%. Draghi ha resaltado la estricta condicionalidad de estas intervenciones y ha recordado que esto, junto a la petición de activación de los fondos de rescate por parte de los gobiernos, son condiciones necesarias para llevar a cabo su plan. Asimismo, ha explicado que el FMI podrá participar en los programas. Nota de prensa del BCE con un resumen del programa (inglés) | Discurso del presidente, Mario Draghi.
El Consejo de Gobierno del BCE, con el voto en contra del presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, acordó "las modalidades de las transacciones monetarias directas (OMT)", el nombre que recibirán estas intervenciones, dijo en una conferencia de prensa tras el encuentro mensual del banco en Fráncfort. La intervención va dirigida de forma prioritaria a los países que todavía no han pedido el rescate completo pero también podría beneficiar a Atenas, Dublín y Lisboa cuando empiecen a volver a financiarse en los mercados.
Draghi también ha desvelado que las compras de bonos se centrarán en los vencimientos entre 1 y 3 años, y que no tendrá preferencia sobre el resto de bonistas confirmando todos los puntos de la noticia filtrada ayer a la agencia Bloomberg. Asimismo, no habrá límites a las compras ni en tiempo ni en cantidad, que eso sí, serán esterilizadas "por completo".
"Tendremos un mecanismo para evitar escenarios destructivos", aseguró el líder del banco central. En un intento por cumplir su promesa de hacer todo lo necesario para preservar el futuro del euro, Draghi dijo que el nuevo programa de compra de bonos, que se hará en el mercado secundario, "salvaguardará la transmisión de la política monetaria en todos los países de la zona euro".
El banquero italiano explicó que este programa, al que se ha opuesto el Bundesbank (Draghi ha reconocido que la decisión no ha sido unánime, aunque no ha dado nombres), permitirá a la entidad tratar las "distorsiones severas" en los mercados de bonos, así como garantizar la "irreversibilidad del euro".
Estricta condicionalidad y supervisión del FMI
"Nos adherimos estrictamente a nuestro mandato", defendió Draghi, quien apuntó que los gobiernos deben estar listos para activar los mecanismos de rescate cuando haya riesgos o sistuaciones excepcionales, "bajo una estricta condicionalidad".
Asimismo, el banquero italiano señaló "la adhesión de los gobiernos a sus compromisos y la intervención de los mecanismos de rescate son condiciones necesarias". De este modo, el país beneficiario deberá pedir la activación del fondo de rescate de la UE y firmar un memorándum de entendimiento, cuyo cumplimiento será supervisado por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
"Para restaurar la confianza, los políticos deben seguir con gran determinación con la consolidación fiscal, las reformas estructurales y la reforma de las instituciones europeas", ha agregado Draghi. En este sentido, el BCE suspenderá la compra de deuda "cuando no se cumpla el programa de ajuste macroeconómico", según ha avisado el banquero italiano.
La intervención "no tendrá límites previos" y contará con la "talla adecuada para lograr sus objetivos". Se concentrará en la compra de bonos con vencimientos entre uno y tres años con el objetivo de ayudar a los Gobiernos mientras surten efecto los ajustes y reformas estructurales emprendidos.
No habrá preferencia sobre el resto de acreedores
El presidente de la institución monetaria explicó que el BCE renunciará a su condición de acreedor preferente de los bonos públicos que compre bajo su nuevo programa de compra de títulos públicos.
La institución asumió el estatus de acreedor preferente en la reestructuración de deuda de Grecia realizada este año, lo que dejó a los privados con fuertes pérdidas en el valor de sus bonos de ese país, mientras que los títulos en manos del banco salieron indemnes. Los bonos comprados por el BCE bajo el nuevo programa acordado el jueves estarían sujetos "al mismo tratamiento pari passu", al igual que los bonos similares en manos de otros inversores, afirmó Draghi.
Asimismo, el banquero italiano indicó que se informará semanalmente de las cifras de este programa. Draghi también ha explicado que el SMP, el anterior programa de compra de bonos, ha finalizado, pero que se mantendrán los bonos que ya han adquirido hasta su vencimiento.
En este sentido, Draghi ha asegurado que habrá mucha más transparencia en el nuevo programa, por lo que el BCE publicará semanalmente el volumen de compra de deuda soberana de países de la zona del euro con problemas y un desglose por países mensualmente, así como la duración y la valoración de los bonos que adquiera.
"En manos de España"
El italiano ha puntualizado que está "en manos del Gobierno español" decidir si pide la activación de la compra de bonos por parte del fondo de rescate y del propio BCE para abaratar la financiación de su deuda.
"En cuanto a España, nosotros hemos marcado una ruta, está en manos de los Gobiernos, del Gobierno de España y de los Gobiernos de la Eurozona" decidir si activan la compra de deuda, ha dicho Draghi en rueda de prensa al ser preguntado por si el nuevo programa estará listo en octubre, cuando el Gobierno de Mariano Rajoy debe hacer frente a importantes vencimientos de deuda.