
El Gobierno catalán tiene previsto aplicar un recorte salarial de casi el 2% a los empleados públicos de la Generalitat en la paga del próximo diciembre, que se sumaría a la rebaja del 3% planeada para la nómina de junio.
Estos planes quedarían anulados si el Gobierno de Mariano Rajoy decide en las próximas semanas imponer por su cuenta una rebaja general en el sueldo de los funcionarios de todo el Estado.
Tras reunirse en el Palau de la Generalitat con el presidente canario, Paulino Rivero, el presidente catalán, Artur Mas, ha recordado que hace unos meses ya anticipó que la reducción de salarios de los funcionarios en 2012 rondaría el 5%.
Si el Gobierno central decide aplicar una medida similar a nivel estatal, entonces Cataluña retiraría su propuesta y se adaptaría a la decisión de Rajoy. "¿Qué puede hacerlo variar? Que el Gobierno plantee una reducción del salario de la función pública. Entonces retiraríamos la medida y aplicaríamos la del Gobierno central", ha señalado Mas.
El presidente catalán ha argumentado que, aunque el recorte será del 3% en la paga de junio, ya advirtió en noviembre de que el ajuste global iba a alcanzar el 5%, algo que ahora está pendiente de lo que decida hacer Rajoy.
Mas también ha hecho hincapié en que Cataluña no debería plantearse nuevos recortes si el Estado cumple con lo que adeuda a la comunidad en los presupuestos que presente para este 2012: "Según como se liquiden las deudas, podremos pasar mejor o no tan bien el ejercicio, y ahora no lo sabemos porque el Gobierno no ha dicho qué hará".
Disposición adicional tercera
Mas no tiene "constancia" de que el Ejecutivo de Rajoy haya decidido incluir en sus Presupuestos de 2012 una partida de 211 millones de euros relativa a la Disposición Adicional Tercera del Estatut, de la que ya se adeuda una partida anterior de 759 millones.
El presidente catalán ha afirmado que el pago de deudas como ésta aligeraría las políticas de austeridad y las tensiones de tesorería, y ha concluido: "Será un incumplimiento muy grave si no se produce -el pago de esta partida-. Los gobiernos serios son aquellos que hacen todo lo que está en su mano para cumplir con deudas pendientes".
Ha insistido en pedir al Gobierno que aplique una distribución "justa" de los objetivos de déficit, ya que ha considerado que a las autonomías se les exige un esfuerzo desproporcional respecto a lo que se autoexige el Estado.