
El consejero delegado de British Airways, Willie Walsh, se encuentra, en este momento, con el plato lleno en lo que a alianzas se refiere, al negociar en dos mesas separadas con Iberia y Qantas. Se trata de una estrategia que ha puesto nerviosos a ambos interlocutores, que no han ocultado que aspiran a una relación exclusiva.
"No me interesa lo que han publicado recientemente los medios de comunicación -dijo Walsh en una entrevista a Il Sole 24 Ore- puedo tranquilamente decir que hemos explicado por separado tanto a Iberia (IBLA.MC), como a Qantas que no vemos un acuerdo con cada una de las dos como definitivo".
"La estructura de control tiene que ser compleja. No podemos poner en marcha una estructura que descarte otras posibilidades de consolidación". ¿Incluso con los italianos? "Un acuerdo con otros socios no puede llevar a exclusiones hacia los italianos".
Alitalia en el prismático
British Airways (BAY.LO) está interesada en alcanzar un acuerdo con Alitalia. De momento, la propuesta es meramente comercial, pero en futuro no se puede excluir un salto de calidad también desde el punto de vista accionarial.
"Ante todo quiero decir que nuestro objetivo no es un acuerdo que implique un intercambio de acciones, pero nuestra propuesta tampoco es complementaria a la toma de participaciones por parte de otros. Es alternativa e incompatible". Willie Walsh, consejero delegado de Bristish Airways, aclara a Il Sole 24 Ore que el interés hacia Alitalia por parte del coloso británico de los cielos es real.
"Opinamos -apuntó- que un acuerdo comercial es una alternativa absolutamente perseguible. He hablado de ello con el consejero delegado de la nueva Alitalia, Rocco Sabelli, en un par de encuentros en los que le he explicado los beneficios de un acuerdo alternativo a una participación en el capital de la compañía. Esta última, si es significativa, tal y como aseguran los medios de comunicación sobre las varias hipótesis que se están discutiendo, tiene valor para quien compra sólo si, al final del proceso, podrá tener un peso real. Lo que nosotros ofrecemos, en las condiciones actuales, es una colaboración creíble que deje a la compañía italiana la posibilidad de decidir sobre su futuro en un modo flexible".
Una fusión es posible
Pero no lo es todo: Walsh no excluyó que, en perspectiva "el acuerdo pueda asumir otra dimensión". ¿Incluso accionarial? "Si nos encontráramos con una nueva situación y con la oportunidad, ya veremos". Según Walsh, la flexibilidad es clave: "en el pasado hemos alcanzado acuerdos tanto accionariales como comerciales -puntualizó- y la participación no crea una relación más sencilla".
Además, Walsh mostró el músculo, cuando se le recordó que la libra y los títulos de British no están en su mejor momento. "Tenemos 1.800 millones de libras en caja -unos 2.000 millones de euros al cambio actual-, y disponemos de financiaciones para comprar nuevas aerolíneas hasta 2012, cosa que no ocurre en muchas otras compañías", dijo.
Con respecto a los escandinavos de SAS, Walsh dijo que "creo que es más probable que su orientación sea hacia Lufthansa (LHA.XE). Para ellos, creo que son los socios más naturales". En lo que a la concesión de ayudas de Estado a otras compañías se refiere, el directivo apuntó que "estoy muy en contra de semejantes medidas, tanto para los coches como para las aerolíneas".