Empresas y finanzas

Las Álvarez proponen que Nuño de la Rosa sea presidente de El Corte Inglés

  • Víctor del Pozo seguiría como consejero delegado

Las hermanas Marta y Cristina Álvarez están dispuestas a ceder la presidencia de El Corte Inglés a una persona ajena a la familia para poner fin al conflicto abierto en el capital. Aunque en un principio la presidenta iba a ser Marta Álvarez, ante la reclamación de varios consejeros, como Carlos Martínez Echavarría, Florencio Lasaga, Al Thani o Manuel Pizarro, para poner fin a la guerra abierta, las hijas de Isidoro Álvarez han preferido optar por un independiente. Y el elegido es Jesús Nuño de la Rosa.

El todavía presidente del grupo, Dimas Gimeno, planteó hace unos días su renuncia voluntaria al cargo a cambio de que le sucediera en el mismo alguien ajeno a la familia y ve ahora positivamente el nombramiento de Jesús Nuño de la Rosa. Se trata del exdirector general de Viajes El Corte Inglés, que el pasado mes de octubre fue nombrado consejero delegado junto a Víctor del Pozo y que es el máximo responsable del último acuerdo con la banca acreedora para la refinanciación de 3.650 millones de euros.

Nuño de la Rosa seguirá siendo en principio ejecutivo, aunque con Del Pozo como número dos. El Corte Inglés ha declinado, por ahora, hacer ningún comentario, a la espera de que se convoque un consejo extraordinario para aprobar el relevo.

Acuerdo económico

El posible acuerdo para pacificar El Corte Inglés tiene todavía, sin embargo, algunos flecos pendientes. Dimas Gimeno, junto a su madre y su tío, María Antonia y César Álvarez respectivamente, han reclamado a las hermanas Álvarez la segregación de sus acciones en la patrimonial Cartera de Valores Iasa, pero éstas les han reclamado a cambio que retiren todas las demandas presentadas contra ellas. Y ese es el punto ahora mismo más difícil. El problema de fondo para la familia de Gimeno es que el 7% que controlan en El Corte Inglés está en la firma patrimonial Cartera de Valores Iasa, que aglutina en conjunto el 22,18% del grupo, pero que está controlada por las hermanas Álvarez, que heredaron de su padre el 69% de las acciones de la misma.

Esa es la razón por la que Gimeno, que tiene junto a su familia el 31% restante, ha planteado la necesidad de dividir la sociedad para poder facilitar la venta de sus acciones. Aunque, en un principio, la hermanas Marta y Cristina Álvarez se negaron, todo podría cambiar si finalmente hay un pacto.

En los últimos días ha habido varias reuniones entre los abogados de una y otra parte para intentar alcanzar así un acuerdo. Ellas podrían aceptar la segregación de las acciones y ellos, a cambio, retirar las demandas presentadas en los juzgados de lo mercantil de Madrid. En concreto, los dos hermanos de Isidoro Álvarez -María Antonia y César- han llevado a sus sobrinas a los tribunales por haber llevado a cabo una reducción de capital en 2016 de 121 millones de euros, justo antes de su entrada en el consejo de la sociedad.

Y no solo eso porque la madre de Dimas Gimeno denunció también un cambio de última hora en el testamento de Isidoro Álvarez, que se habría hecho, según denuncia, de forma irregular y por el que habría pasado de recibir 5 millones en lugar de los 10 millones que estaban previstos en un principio.

Reunión del consejo

Si el pacto finalmente se cierra, tal y como parece, el consejo de administración de El Corte Inglés se celebraría a lo largo de la próxima semana. La compañía pondría así fin, en principio, al conflicto abierto en su capital. Eso, a la espera, no obstante, de la entrada en el mismo el próximo mes de julio del inversor catarí Al Thani, que se hará con un 10% como mínimo de las acciones -puede llegar al 12,25% si capitaliza los intereses del préstamo que concedió de mil millones en 2015-, que ha exigido ya poner en marcha la salida a bolsa y constituir una comisión a tal efecto.

De momento, queda pendiente aora la convocatoria del consejo de administración extraordinario en que se debía votar la destitución de Gimeno y la designación de un nuevo presidente. El pasado 4 de mayo, los dos consejeros delegados -Víctor del Pozo y Jesús Nuño de la Rosa, junto a Lasaga y Martínez Echavarría- le reclamaron, de acuerdo con los estatutos, esta reunión, pero Gimeno amenazó entonces con su impugnación, asegurando que ésta no se le había notificado por escrito. Eso bligó al secretario del máximo órgano ejecutivo, Antonio Hernández-Gil, a hacerlo así seis días después, el 10 de mayo.

Ante todo ello, las hermanas Álvarez optaron por no tensar la cuerda, decantándose por esperar a ese día, el próximo domingo, para la convocatoria extraordinaria. Las negociaciones se están intensificando ahora para intentar cerrar un acuerdo definitivo antes y que el consejo se pueda celebrar a lo largo de la próxima semana.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky