
El Grupo Renault compartió este viernes con el mercado y los analistas su plan de actuación para los seis próximos años, un periodo de tiempo en el que se democratizará el uso de los coches conectados y en el que comenzará a circular el coche autónomo, al mismo tiempo que la movilidad sostenible será asignatura pendiente para toda la industria. Ante escenario, la compañía francesa prevé situarse al frente de la digitalización del sector a la vez que multiplicará su negocio.
En concreto, bajo el lema Drive Future, el grupo automovilístico pretende ingresar más 70.000 millones de euros en el horizonte de 2022 y superar los cinco millones de vehículos vendidos en 2017, duplicando el negocio fuera de Europa y con un incremento de las ventas de unidades superior al 40%, frente a los 3,47 millones de vehículos vendidos en 2016. Según el mismo plan, la compañía pretende fijar su margen operativo por encima del 7%, lo que supone incrementar el valor en 50%, con un mínimo del 5% a lo largo de todo el plan.
Crecimiento sostenible
Carlos Ghosn, presidente-director general de Renault, ha declarado sobre el plan estratégico que "el Drive the Future pretende un crecimiento fuerte y sostenible, sacando partido de las inversiones realizadas en las regiones y productos clave, capitalizando los recursos y tecnologías de la alianza (con Nissan y Mitsibushi) y mejorando nuestra competitividad", indicó a través de un comunicado.
Entre los elementos más destacados del referido plan, que el viernes se desveló en París a través de videoconferencia, se encuentra la intención de producir 21 nuevos vehículos, tres de ellos adicionales a lo inicialmente contemplado. También llama la atención la firme apuesta por el mercado ruso y chino, países donde Renault reforzará su presencia, inversiones e implantación. En el caso del gigante asiático, el grupo "acelerará las actividades" con nuevas empresas y alianzas estratégicas en vehículos eléctricos y vehículos comerciales. Algo parecido a lo anterior se producirá en Brasil, India e Irán, mercados en los que Renault espera convertirse en referencia a lo largo de los seis próximos años.
Respecto a los planes de automatización de los vehículos, Renault se compromete a disponer del 100 por cien de los vehículos conectados en los mercados clave, así como lanzar 15 vehículos autónomos (que no requerirán el concurso de conductores para poder circular) en los seis próximos años. En ese periodo, las inversiones en Investigación y Desarrollo (I+D) alcanzarán los 18.000 millones de euros, con un efecto multiplicador gracias a la contribución que mantiene con los otros miembros de la Alianza: Nissan y Mitsubishi.
Servicios de movilidad
En los últimos años del plan Drive the future, Renault confía en poner en marcha nuevos servicios de movilidad, algunos de ellos a demanda, como los servicios de robots-taxis, denominados Ride-hailing. En el mercado de vehículos eléctricos, la firma contempla mantener su posición destacada en ese segmento con el lanzamiento de ocho nuevos modelos eléctricos y otros 12 electrificados.
Asimismo, Renault incidirá en la "globalización de la gama de vehículos comerciales ligeros para convertirse en un actor principal a nivel mundial", así como la ampliación de la gama Global Acces del grupo.
Según informa Renault a través de un comunicado, la intención del grupo apunta a que el 80% de los vehículos sean fabricados en las plataformas comunes de la alianza en 2022.