
Sacyr, Abanca y Kutxabank han llevado a arbitraje el conflicto abierto con Corsair que les impide salir del capital de Itínere, una de las mayores concesionarias de autopistas del mundo. La constructora y las dos entidades financieras dieron el paso definitivo el pasado viernes, según ha podido confirmar este periódico con fuentes jurídicas, tras agotar todas las vías amistosas.
Con una participación conjunta del 55,45% en la concesionaria española, las tres compañías llevan ya varios años intentando negociar su desinversión con el fondo estadounidense Corsair, que con el 38% del capital de Itínere, lleva las riendas de la compañía después de que Citi Infrastructure le traspasara la gestión de su cartera hace ya dos años.
Según han confirmado las mismas fuentes, en la solicitud de arbitraje presentada a la Corte de Arbitraje de la Cámara de Comercio de Madrid, Sacyr, Abanca y Kutxabank denuncian que se ha producido por parte de Corsair un "abuso de la situación de control que se le otorgó de forma temporal y de un modo excepcional, pero que sin embargo, se está asumiendo como algo permanente". Así, aseguran que "la sociedad ha incumplido su compromiso de facilitar su salida cuando llegarán ofertas por la compañía, lo que supone una situación de bloqueo que ha impedido al resto de accionistas de Itínere ejercer sus derechos en la compañía y obtener liquidez". Concretamente, los socios tiene sobre la mesa una oferta de Globalvía por la totalidad de Itínere que supera los 1.000 millones y que es rechazada por Corsair.
Con el 23,8%, Abanca se posiciona como el segundo mayor accionista, seguido de Kutxabank (16,2%) y de Sacyr, que cuenta con el 15,45%. Además de Corsair, el otro accionista que falta en el combo es Liberbank que hasta hace poco también estaba interesado en vender su participación del 5,8%. Sin embargo ahora se ha posicionado en las filas del fondo estadounidense. Un cambio de postura que llevó a la constructora que preside Manuel Manrique y a las dos entidades financieras a solicitar formalmente a Corsair conocer las condiciones de su acuerdo con Liberbank, petición que no ha sido respondida, según explicó elConfidencial.
La resolución a este conflicto llegará seguramente a principios del año que viene, ya que una vez constituido el tribunal y los tres afectados presenten toda la documentación pueden pasar entre ocho y diez meses hasta que se conozca el laudo definitivo.