
Morgan Stanley obtuvo un beneficio neto de 1.930 millones de dólares, o un dólar por acción, al cierre del primer trimestre, un 70% más si se comparan con los 1.130 millones, o 55 centavos, que ganó en el mismo periodo de 2016. Los analistas consultados por Reuters esperaban un beneficio por acción de 88 centavos.
Los ingresos crecieron a 9.750 millones de dólares desde los 7.790 millones del año anterior. Los expertos esperaban que esta cifra se situase en 9.270 millones.
Por áreas de negocio, la división de valores institucionales ingresó 4.058 millones de dólares, un 39% más, la de gestión de riqueza aumentó un 11% hasta 4.058 millones, y la de gestión de inversión ingresó 609 millones, un 28% más.
"Hemos reportado uno de los trimestres más sólidos de los últimos años", dijo al anunciar las cuentas el consejero delegado, James Gorman. El máximo ejecutivo del banco de inversiones destacó que están confiados en su modelo de negocio y las oportunidades que tienen por delante, pero al mismo tiempo reconoció que las condiciones siguen siendo "inciertas".
El banco anunció que en el primer trimestre destinó unos 750 millones de dólares a su programa de recompra de acciones y el consejo de administración aprobó el pago a los accionistas de un dividendo de 0,20 dólares por cada título.