
El fabricante de productos de consumo y alimentación Unilever ganó 2.512 millones de euros en el primer semestre de su ejercicio fiscal, lo que representa un incremento del 1% con respecto al beneficio neto atribuido correspondiente al mismo periodo del año anterior, según ha confirmado hoy la compañía con sede en Países Bajos.
La cifra de negocio de la propietaria de marcas como Lipton, Dove o Ben & Jerry's alcanzó los 26.283 millones de euros, un 2,6% por debajo de la facturación obtenida en los primeros seis meses de 2015, según ha detallado en un comunicado.
La firma ha precisado además que sus ventas sufrieron un impacto negativo del 7,6%, por lo que, sin tener en cuenta los tipos de cambio, el beneficio neto atribuido de la compañía se incrementó un 6,3% y la facturación, un 5,4%.
En el segundo trimestre, los ingresos de Unilever sumaron 13.735 millones de euros, un 3,2% menos que un año antes. El cambio de divisa impactó negativamente un 8,1% en este periodo.
El consejero delegado de la compañía, Paul Polman, ha destacado que a pesar de la ralentización de la economía y de la creciente inestabilidad política, el grupo creció de manera "rentable y competitiva" gracias a sus innovaciones.