Abengoa mudará su sede corporativa en Madrid a finales de julio. El grupo andaluz abandona el edificio del Paseo de la Castellana 43, propiedad de Inmobiliaria Colonial, que ocupa, en régimen de alquiler, desde el año 2013.
Según señalan fuentes del mercado, la compañía que preside Antonio Fornieles trasladará sus oficinas a un inmueble propiedad de Metrovacesa en la calle Manuel Pombo (el número 20), en el barrio de Sanchinarro. Esta medida se suma a las políticas de recortes que la firma sevillana ha acometido en los últimos meses.
Con el traslado, Abengoa rebajará en alrededor del 80% los costes por el alquiler de su sede en Madrid. Así, dos meses de renta en el Edificio Castellana 43 equivalen a la de un año completo en sus nuevas oficinas en la capital, que acogerán a cerca de 170 trabajadores. La salida voluntaria de empleados y los despidos han adelgazado a prácticamente la mitad la plantilla de Abengoa en Madrid, por lo que ya no necesita un inmueble de las dimensiones del de Paseo de la Castellana.
Las dificultades económicas de Abengoa, que trata en estos momentos de salir del preconcurso de acreedores, habían provocado varios meses de retraso en el pago del alquiler, lo que creó una disputa legal con Colonial. La ingeniería sevillana tendrá que pagar estos atrasos a la inmobiliaria, que coloca así en el mercado uno de sus activos más valiosos.
Edificio Encinar
La nueva sede en Madrid de Abengoa, denominado Edificio Encinar, consta de cuatro alturas y dos subplantas con una superficie de 3.623 metros cuadrados y 107 plazas de aparcamiento.
El Edificio Castellana 43, por su parte, está situado en el corazón de la zona financiera de Madrid. Cuenta con nueve plantas, una superficie total de 8.462 metros cuadrados sobre rasante y 69 plazas de coche y 12 de moto. Colonial ya está en negociaciones avanzadas con una firma para sustituir a Abengoa.
El inmueble cuenta con la máxima certificación medioambiental, Leed Gold. Esta condición la consiguió tras la reforma que promovió Abengoa cuando alquiló el inmueble y que fue diseñada por el estudio de arquitectura Richard Rogers, el mismo que se encargó de Palmas Altas, la actual sede Abengoa en Sevilla. Antes de la llegada del grupo a Castellana 43, el edificio era la sede de la firma de servicios profesionales Pricewaterhouse Coopers (PwC), que se trasladó a la hasta entonces denominada Torre Sacyr Vallehermoso (hoy Torre PwC).
Abengoa prosigue así con su estrategia para rebajar los costes ordinarios. En los últimos meses ha suprimido o rebajado la estructura de sus filiales, ha recortado la plantilla y gastos en teléfono o viajes, ha abandonado proyectos y ha vendido varios activos. En este sentido, la multinacional andaluza traspasó por alrededor de 3 millones varios pisos en la calle General Martínez Campos de Madrid que tenía en propiedad y que sirvieron de oficinas centrales hasta desembarcar en Castellana 43. También puso a la venta la antigua sede de Abengoa en la Avenida de la Buhaira (Sevilla).