
Banco Santander ha obtenido un beneficio de 5.966 millones de euros en 2015, lo que supone un aumento del 2,57% respecto a 2014, en un ejercicio marcado por un contexto económico internacional "complejo", con tipos de interés en mínimos históricos en monedas clave para el grupo, como el euro, la libra o el dólar, según ha informado la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En cambio, el beneficio ordinario sin el efecto de los resultados no recurrentes ha crecido un 13%, y ha alcanzado los 6.566 millones de euros. El banco ha aumentado un 6% el crédito y un 7% la captación de recursos, lo que permite una mejora del 8% en los ingresos comerciales y un 13% en el beneficio ordinario.
"En 2015 hemos alcanzado nuestros objetivos y lo hemos hecho aumentando los ingresos, mejorando la satisfacción del cliente y con más clientes vinculados y digitalmente activos", se ha congratulado la presidenta de Banco Santander, Ana Botín, quien ha concretado que la entidad ha elevado el número de clientes vinculados en 1,2 millones, hasta 13,8 millones, y en 2,5 millones el de clientes digitalmente activos, hasta 16,6 millones.
'Cuenta 1, 2, 3'
El banco presidido por Botín ha proclamado que ha recuperado el liderazgo en satisfacción de clientes en España, gracias al producto 'estrella' lanzado en mayo del pasado año: la 'Cuenta 1, 2, 3'. Esta estrategia suma ya 860.000 cuentas, de las que 50.000 son de pymes. El Santander ha 'robado' con este producto 237.000 nóminas de clientes de otras entidades. El ritmo de apertura de 'Cuentas 1, 2, 3' supera las 100.000 al mes y el objetivo del banco es alcanzar los dos millones de cuentas al finalizar este ejercicio.
Por países, la mayor aportación al beneficio del grupo corresponde a Reino Unido, con un 23%, seguido de Brasil (19%), España (12%), Estados Unidos (8%), México (7%), Chile (5%), Portugal, Argentina y Polonia (4% cada uno de estos tres países). Ana Botín ha puesto en valor que estos crecimientos de negocio y resultados permiten al banco distribuir un dividendo por acción de 0,20 euros, de los que 0,16 euros son en efectivo, un 79% más que en 2014. Este dividendo supone una rentabilidad por acción de alrededor del 5% a los precios actuales de la acción.
En cuanto a la tasa de mora, ésta se ha situado en el 4,36% para el conjunto del grupo, con un descenso de 0,83 puntos en un año. La mora ha descendido en todos los mercados excepto Brasil, que pesa el 8% de los créditos del grupo. El ratio de capital CET1 fully loaded, el que asume las exigencias de capital que estarán vigentes el 1 de enero de 2019, ha alcanzado el 10,05%, lo que supone 0,4 puntos más que hace un año.
Ni ampliaciones de capital ni ventas de activos
En la presentación de los resultados, la presidenta de Banco Santander ha adelantado que la entidad no tiene previsto llevar a cabo una ampliación de capital ni vender activos a lo largo de este ejercicio.
Botín ha reconocido que el banco no está operando "en un contexto fácil" y ha considerado que el futuro va seguir siendo "un desafío", pero cree que también habrá oportunidades. "Operamos en muchos mercados donde tenemos oportunidades de crecer", ha indicado la directiva, quien ha insistido en que el banco quiere centrarse en el crecimiento orgánico y en buscar un mayor crecimiento estructural en mercados emergentes.
Botín valora la escena política
La presidenta de la entidad confía en que los partidos políticos "sabrán encontrar una solución que permita gobernar España" para que la recuperación económica del país no se ponga en peligro.
España, ha incidido, está "en una situación coyuntural positiva" y la recuperación económica es "bastante equilibrada", el consumo se recupera y se crean puestos de trabajo, por lo que, en su opinión, "tenemos que lograr entre todos que esto siga". En cualquier caso, Botín no ha querido entrar a valorar cualquier posible coalición para la constitución de un nuevo Gobierno en España.
Lo que sí ha dicho es que tiene "plena confianza" en la fortaleza de las instituciones y en que los partidos sabrán encontrar una solución que aporte mayor estabilidad que la actual, en la que el Ejecutivo se mantiene en funciones tras las elecciones generales de finales de 2015.