La teleco que preside César Alierta obtuvo un beneficio neto de 5.403 millones de euros en 2011, lo que supone un descenso del 46,9% con respecto al ejercicio anterior, e ingresó 62.837 millones, el 3,5% más, según ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Las menores ganancias se deben al ajuste contable de Vivo y al ERE.
Tal y como esperaba el mercado, el operador ha sufrido en sus cuentas el impacto de la crisis en España, así como los menores extraordinarios y el coste del ajuste de plantilla en Telefónica España. Sin embargo, los resultados han sido mejores de lo previsto. De media, los analistas consultados por Reuters esperaban que su beneficio neto se redujera más del 50%.
Ajustes con Vivo y el ERE
Entre los atípicos destaca la revalorización de la participación de Telefónica en la brasileña Vivo durante el tercer trimestre de 2010, cuyas plusvalías de 3.797 millones se tradujeron un año después en sentido contrario, desvirtuando las comparaciones en términos orgánicos.
También pesó el ajuste laboral en la filial española aprobado el pasado verano, por importe de 2.500 millones de euros, con el que el grupo reducirá 6.500 empleos en los tres próximos años sin costes para las arcas públicas.
De cara al presente ejercicio, la firma prevé que sus ingresos a un crecimiento de sus ingresos a tipos de cambio constante del 1% -frente al 3,5% de 2011- y una caída del margen OIBDA, que esperan que sea inferior a la de 2011, cuando descendió el 32,2%. El cuanto al compromiso de inversión, Telefónica estima que en 2012 será similar al del año anterior y se situará en torno a los 10.200 millones, excluida la compra de espectro.
Los resultados de la multinacional están en línea con los objetivos trazados por Alierta, quien valora especialmente la "capacidad de adaptación" y la "fuerte diversificación" como principales virtudes de su multinacional "en un entorno tan difícil como el actual", explica en su nota al regulador de la bolsa. La solidez de los negocios en Latinoamérica y en el centro de Europa impulsó el flujo de caja del grupo, que ascendió a 9.270 millones de euros, con un repunte de 9,5% respecto a 2010.
Crece el móvil
El grupo de telecomunicaciones ya supera los 306 millones de accesos en todo el mundo, con un repunte notable en los negocios de banda ancha móvil. Como ya se proyectaba en ejercicios anteriores, Latinoamérica representa casi la mitad de los ingresos consolidados del grupo, el 47%, así como el 48% del OIBDA, cuatro punto porcentuales más que doce meses atrás.
También sobresale la pujanza del negocio de los datos móviles, que suponen más del 31% de la facturación total, con crecimientos orgánicos del 19% en términos interanuales, y donde los ingresos de datos ajenos a los SMS ya suman el 52% del total.
Telefónica ha reiterado su política de remuneración al accionista a través de dividendos, de 1,50 euros por acción (1,30 euros en efectivo y una recompra de acciones equivalente a 0,20 euros por título), el recorte en la retribución que avanzaron recientemente, así como un ratio de deuda sobre OIBDA de 2,35 veces.
El negocio en España
El grupo destaca también que el grueso de sus resultados provienen de fuera de su mercado doméstico. Según indica, "las sólidas cifras reportadas por la compañía subrayan la elevada diversificación de sus operaciones. El 72% de los ingresos consolidados y el 67% del OIBDA se generan fuera de los negocios fijo y móvil de Telefónica en España".
Y es que la crisis económica que atraviesa España y la presión competitiva que se respira en el sector recortaron los ingresos del operador en su mercado doméstico el 7,6% interanual, pero anotó un descenso más acuciado en el último trimestre de 2011, periodo en el que las ventas cayeron el 9,5%. Asimismo, los ingresos por servicios móviles se redujeron el 9,9%, hasta los 6.548 millones, con un desplome en el último trimestre del 14,1%.
Frente a las referidas circunstancias, Telefónica España adoptó diversas decisiones para reducir sus costes operativos, a través del Expediente de Regulación de Empleo, al mismo tiempo que afinó su posicionamiento competitivo, a través de nuevas tarifas y la puesta en marcha de descuentos cruzados ventajosos para sus clientes, tanto en móviles como en fijo y acceso a Internet. Con todo ello, el grupo cerró 2011 con 47,1 millones de clientes en España, el 1 por ciento menos que en 2010.
La partida de gastos alcanzó los 12.622 millones de euros en 2011, con un aumento interanual del 20,3% por el ERE (los gastos de personal casi se duplicaron con el ajuste laboral emprendido), pero excluido estos impactos extraordinarios la magnitud se redujo el 2,3% en 2011.
Consejo y retribuciones
La retribución fija de los consejeros y directivos de Telefónica se mantuvo congelada en 2011 y sólo se registraron incrementos en la partida correspondiente a remuneración a largo plazo por operaciones sobre acciones u otros instrumentos financieros, estas últimas fijadas en función del cumplimiento de unos ratios de rentabilidad comparativa respecto al resto del sector.
Según se desprende de la comunicación remitida por el grupo de telecomunicaciones a la CNMV, el consejo de administración recibió el año pasado un total de 28,1 millones de euros, una cifra muy similar a la del ejercicio anterior.
Por su parte, la remuneración total de la Alta Dirección de Telefónica suma 19,5 millones de euros en 2011, en línea con el importe repartido doce meses atrás, si bien las retribuciones del Presidente y la alta dirección bajarán este año como consecuencia de la reducción en el 13% del salario variable. El incremento que se refleja en la comparativa de 2011 se debe principalmente al aumento en los miembros de la Alta Dirección tras la reorganización del organigrama realizado en septiembre de 2011.
El operador recuerda que las retribuciones variables que se abonan en 2011 corresponden al cierre del ejercicio 2010, que fue el año de mayores resultados en la historia de la compañía. Pese a ello, en lo que afecta al presidente y los dos consejeros ejecutivos, como al resto de la Alta Dirección de la empresa, el variable que se abonará en 2012, será con cargo a resultados de 2011, por lo que registrará una reducción del referido 13%, mientras que el salario fijo se congelará por segundo año consecutivo.