El producto interior bruto (PIB) real aumentó a una tasa anual del 3,2% en el tercer trimestre de 2017, de acuerdo con la tercera estimación publicada por la Oficina de Análisis Económico, mientras que la previsión era de un crecimiento del 3,3%. En el segundo trimestre, el PIB real aumentó 3,1%.
Los ingresos internos brutos reales (IDG) aumentaron un 2,0% en el tercer trimestre, en comparación con un aumento del 2,3% en el segundo. El promedio del PIB real y de los ingresos reales, una medida complementaria de la actividad económica de los EEUU, que pondera por igual el PIB y los ingresos, aumentaron un 2,6% en el tercer trimestre, en comparación con un aumento del 2,7% en el segundo trimestre.
La cifra es algo inferior a las estimaciones de los analistas, que habían anticipado un 3,3% de expansión. El dato vino impulsado por un menor aumento en el gasto de los consumidores, que supone dos tercios de la actividad económica, y creció 2,2%, frente al 2,3% anticipado previamente.
Esa continuada mejora económica de EEUU ha hecho que la Reserva Federal (Fed) haya subido en tres ocasiones este año los tipos de interés, la última fue hace una semana, hasta dejarlos entre el 1,25% y 1,5%.
El presidente, Donald Trump, llegó en enero a la Casa Blanca con la promesa de lograr un crecimiento anual superior al 3% ayudado por un ambicioso plan que supondría la mayor reforma fiscal del país en varias décadas y recortaría los impuestos a las empresas y a muchos estadounidenses.
El plan, tras superar diversos obstáculos, fue aprobado ayer por las dos cámara del Congreso y promete, según los republicanos, acelerar el crecimiento económico hasta cerca del 4% anual.
