
BBVA sigue viendo fortalezas en la economía española, pero, al igual que el Gobierno, empeora desde ya tres décimas su previsión de crecimiento del PIB para 2018, lo que supone algo más de 3.000 millones, por la tensión con Cataluña. La AIReF contemplaba recientemente un impacto de 12.000 millones en caso de enquistarse la situación.
A mediados de julio, el banco presidido por Francisco González, pronosticaba que la economía española crecería un 2,8% en 2018, sin embargo ahora calcula que el avance será de 2,5%, teniendo en cuenta las consecuencias de la crisis catalana.
De este modo rebaja tres décimas la previsión de crecimiento de la economía española para 2018, al igual que ha hecho el Gobierno, aunque en este último caso la reducción del alza esperada del PIB en 2018 fue del 2,6% al 2,3%.
El consejero delegado del banco, Carlos Torres Vila, ha dado a entender en una conferencia con analistas que la nueva previsión para el próximo año se trata de una estimación preliminar que dependerá de cuándo se resuelva la incertidumbre.
BBVA confía en que esas dudas desaparezcan pronto y ensalza el dinamismo que mantiene la economía española, que cerrará 2017 con un avance cercano al 3% y unas tasas de paro que han caído hasta niveles que no se veían desde hacía tiempo.
En respuesta a los analistas, el "número dos" del banco ha reconocido que ha habido mucha incertidumbre este mes a consecuencia de la deriva independentista de Cataluña, lo que se tradujo en algo de "nerviosismo" entre los clientes y "algunos movimientos" en depósitos durante unos días.
Depende de la duración de la crisis
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha alertado de que la incertidumbre asociada a la crisis institucional en Cataluña podría reducir al 1,5% el crecimiento económico de España 2018 en el peor escenario, frente al 2,3% apuntado por el Gobierno. La previsión del supervisor contempla un impacto entre los 4.000 millones y 12.000 millones.
Esta "crisis institucional" restará entre 0,4 y 1,2% al crecimiento del PIB el próximo año -tomando como base un repunte del 2,7, que es el escenario central de la AIReF-, en función de si el impacto es temporal o se cronifica.