
El Fondo Monetario Internacional ha reducido su pronóstico para la economía mundial este año y el que viene como consecuencia del inesperado voto a favor del Brexit que ha generado una ola de incertidumbre a la ya de por sí frágil confianza empresarial y de los consumidores.
"El voto a favor del Brexit implica un aumento sustancial de la incertidumbre económica, política e institucional, que puede tener consecuencias macroeconómicas negativas, especialmente en las economías avanzadas de Europa", según asegura la institución en su actualización de las Perspectivas de la Economía Mundial (WEO, por sus siglas en inglés) publicadas en Washington.
"El Brexit ha generado un parón en las obras", considera Maury Obstfeld, economista jefe del FMI, quien considera que todavía es muy difícil cuantificar las repercusiones potenciales de la petición de divorcio de Reino Unido a la Unión Europea.
Teniendo en cuenta el ritmo de actividad económica más favorable de lo previsto observado en lo que va de 2016 y los efectos probables del Brexit, la institución rebajó su pronóstico de crecimiento mundial para 2016 y 2017 en 0,1 puntos porcentuales hasta el 3,1% y al 3,4% respectivamente, en relación con las últimas proyecciones publicadas en abril.

En las economías avanzadas, la mayor revisión a la baja del crecimiento proyectado corresponde al Reino Unido. Si bien el crecimiento durante el primer semestre del año parece haber sido ligeramente más vigoroso de lo previsto en abril, se proyecta que el aumento de la incertidumbre tras el referéndum debilitará considerablemente la demanda interna con respecto a los pronósticos anteriores, lo cual implica que el crecimiento ha sido revisado a la baja en alrededor de 0,2 puntos porcentuales para 2016 y cerca de 1 punto porcentual en 2017.
En Estados Unidos, el crecimiento durante el primer trimestre ha sido más débil de lo esperado, lo cual ha generado una revisión a la baja de 0,2 puntos porcentuales con respecto al pronóstico de crecimiento para 2016.
Mientras tanto, en la eurozona, dados los posibles efectos de una mayor incertidumbre en la confianza de los consumidores y las empresas (y las posibles tensiones bancarias), el crecimiento se ha revisado a la baja para 2017 en 0,2 puntos porcentuales con respecto a abril, mientras que se proyecta que el crecimiento en 2016 siga siendo ligeramente más alto, dados los resultados registrados durante el primer semestre del año. "Sin embargo, los retrasos en la resolución de los problemas heredados de la crisis en el sector bancario siguen planteando riesgos a la baja para las perspectivas", avisan desde el FMI.
En Japón, se prevé que la mayor apreciación del yen en los últimos meses afecte al crecimiento en 2016 y 2017 por lo que el pronóstico de crecimiento para 2016 se ha reducido en alrededor de 0,2 puntos porcentuales, y se proyecta ahora que la revisión al alza del crecimiento en 2017 sea solamente de 0,2 puntos porcentuales.
En China, las perspectivas a corto plazo han mejorado gracias al reciente respaldo a la política económica. El impacto directo del referéndum en el Reino Unido probablemente será limitado por lo tanto, las perspectivas de crecimiento en general no han variado con respecto a la edición de abril (e incluyen una ligera revisión al alza para 2016).
Las perspectivas en otros mercados emergentes grandes han variado ligeramente. La confianza de los consumidores y las empresas parece haber comenzado a repuntar en Brasil, y la contracción del PIB en el primer trimestre fue más moderada de lo previsto. Por consiguiente, se proyecta ahora que la recesión de 2016 sea ligeramente menos grave, y que el crecimiento vuelva a ser positivo en 2017. Sin embargo, persisten incertidumbres sobre la política económica que empañan las perspectivas.
Escenarios alternativos para la economía mundial tras el Brexit
El FMI acompaña su actualización del WEO con un análisis donde se elaboran dos escenarios alternativos, uno ?a la baja? y otro ?severo? en lo que al Brexit se refiere.
En el primer escenario, los expertos de la institución describen un contexto donde las condiciones financieras son más estrictas y la confianza del consumidor más débil de lo previsto actualmente, tanto en el Reino Unido como el resto del mundo, hasta la primera mitad de 2017. También se asume que una porción de los servicios financieros del Reino Unido migra gradualmente a la eurozona. El resultado sería una mayor desaceleración del crecimiento mundial este año y el próximo.
El segundo escenario, el FMI prevé una intensificación de las tensiones financieras, sobre todo en Europa, un endurecimiento de las condiciones financieras más severa y una erosión más grande para la confianza. Bajo este contexto se asume que los acuerdos comerciales entre el Reino Unido y la UE volverían a las normas de la Organización Mundial de Comercio. En este escenario, "la economía mundial experimentaría una desaceleración más significativa" hasta 2017 que sería más pronunciada en las economías avanzadas.
