
Santiago Niño Becerra, catedrático de Estructura Económica en la Universidad Ramón Llull, cree que el referéndum del Reino Unido es "un plan meditado en el que las grandes empresas han tenido mucho que ver". Ahora se tiene que cumplir el guión esperado y el Reino Unido terminará siendo 'libre'.
Becerra argumenta en La Carta de la Bolsa que "esto del Brexit es una obra de teatro en tres actos. En el primero Reino Unido se ha ido de la UE. En el segundo Escocia puede irse del Reino Unido e Irlanda del Norte puede unirse a la República de Irlanda. En el tercero una Inglaterra sin links directos con nadie puede llegar a acuerdos bilaterales con quien le interese, puede fijar una fiscalidad nula sobre el capital, puede vincular contrato de trabajo con permiso de residencia, etc.".
Las grandes empresas quieren sacar tajada de esta situación y las grandes fortunas lograr un marco fiscal más favorable, según el economista catalán. El Brexit "se parece mucho más a un plan muy meditado en el que el gran poder económico representado por las corporaciones mucho ha tenido que ver. (Seamos claros la propaganda institucional a favor de permanecer podía haber sido muchisisímo más intensa, penetrante y machacona)".
Inglaterra sola tiene 53 millones de habitantes, una renta per cápita de 43.000 dólares y una tasa de paro baja, es decir, es una economía muy fuerte aunque sea sólo Inglaterra. "Sin controles exteriores puede llegar a cualquier parte si cuenta con la bendición de ese poder económico", asegura Becerra.
"Yo creo que la UE no tiene la culpa de que la mayoría de los votantes británicos hayan decidido salir de la UE", asegura el catedrático de la Ramón Llull. Inglaterra no quiere tener ningún tipo de control ni rendir cuentas a nadie.