
Peter Praet, economista jefe del Banco Central Europeo, ha asegurado que el BCE y sus economistas son "creativos" y que si se produce otro shock la institución cuenta con las herramientas adecuadas para responder. En una entrevista publicada en el diario Público de Portugal, Praet sostiene que es importante que los agentes económicos confíen en el BCE para que la economía y los precios alcancen los objetivos marcados.
Mario Draghi, presidente del BCE, desenfundó su bazooka en marzo sorprendiendo al mercado con su contundencia. La institución bajó los tipos de interés al mínimo histórico del 0%, incrementó en 20.000 millones de euros las compras de activos e incluyó los bonos corporativos dentro del radar de la institución monetaria. Tras estas decisiones fueron varios los expertos, analistas y firmas de inversión los que aseguraron que el BCE había llegado a su límite, algo que el propio banco central se ha encargada de negar.
Praet ha explicado en la entrevista con el diario portugués que "las lecciones que se han extraído de nuestra experiencia de los últimos años es que tenemos la capacidad de decidir... Nosotros podemos actuar cuando es necesario, nunca tuvimos un problema de parálisis o tomas de decisiones caóticas. No siempre alcanzamos la unanimidad, pero el apoyo ha sido muy fuerte".
Aún tenemos herramientas
El BCE tiene aún herramientas para responder a cualquier circunstancia que acontezca: "Hemos mostrado en el pasado que podemos ser muy creativos dentro de nuestro mandato. Cuando la gente pregunta si estamos preparados para un nuevo shock, yo siempre contesto lo mismo: confiad en nosotros, siempre encontramos los medios dentro de nuestro alcance y mandato... Aún tenemos espacio en la tubería", sostiene el economista jefe del BCE.
Además, Praet pide paciencia porque algunas medidas anunciadas aún no se han comenzado a ejecutar de facto: "Algunas de las decisiones que tomamos en marzo, como el TLTRO II y la compra de bonos corporativos, no han comenzado aún a ser empleadas".
En lo que se refiere estrictamente a los tipos de interés, Praet insiste en que "los tipos seguirán al nivel actual o más bajos. Esto quiere decir que los tipos de interés siguen siendo una herramienta dentro de nuestra caja. La cuestión es si las condiciones bajo las que nos encontramos nosotros decidiremos si usar ese instrumento".
Y es que los tipos negativos pueden llegar a ser contraproducentes: "Está claro que los tipos negativos pueden tener efectos secundarios, que en algún momento pueden llegar a ser importantes, como el tema de la rentabilidad de los bancos. Pero en general, el impacto positivo sería el dominante".