La agencia de calificación crediticia Standard & Poor's ha rebajado un peldaño la nota de la deuda soberana de Brasil desde 'BBB-' a 'BB+', lo que equivale a un grado especulativo, denominado popularmente como 'bono basura'. La perspectiva del rating de Brasil es negativa, lo que deja abierta la puerta a nuevas bajadas de calificación a medio plazo.
S&P se convierte así en la primera de las tres grandes agencias que degrada a 'bono basura' la deuda de Brasil, después de haber rebajado a negativa la perspectiva de la nota brasileña el pasado 28 de julio. La agencia explica su decisión por los crecientes riesgos de ejecución en las políticas correctivas en marcha derivado de las dinámicas políticas en el Congreso asociadas con el efecto contagio de las investigaciones por corrupción de la petrolera estatal Petrobras.
En este sentido, S&P apunta que la propuesta presupuestaria para 2016 incorpora una nueva revisión de los objetivos fiscales del Gobierno, con una meta de déficit primario del 0,3% del PIB, frente al 0,7% anterior, reflejando "desacuerdos internos sobre la composición y magnitud de las medidas necesarias".
El país obtuvo por primera vez el grado de inversión en 2008 y la rebaja de S&P es un revés para la presidenta, Dilma Rousseff, quien intenta reactivar a la economía y apuntalar las débiles finanzas públicas.
La contracción del PIB será "más prolongada"
Asimismo, la calificadora de riesgos considera que la crisis económica agravará los riesgos de ejecución. En concreto, S&P opina que la contracción del PIB brasileño será "más profunda y prolongada" y ha revisado a la baja sus previsiones hasta el -2,5% este año y el -0,5% en 2016, antes de registrar un ligero crecimiento en 2017.
Por otro lado, S&P señala que la perspectiva negativa asignada al rating de Brasil refleja una probabilidad "superior a una entre tres" de una nueva rebaja de calificación.
"Anticipamos que podría derivarse una rebaja en el próximo año si se produce un mayor deterioro de la posición fiscal de Brasil o si se revierten políticas clave a raíz de la situación política", añade la agencia.
El Gobierno confía recuperar la confianza
Tras la decisión de S&P, el ministro de Planificación de Brasil, Nelson Barbosa, ha dicho que el país recuperará su grado de inversión una vez que la economía local vuelva a crecer. Barbosa ha asegurado que el Gobierno está trabajando en nuevas propuestas para equilibrar sus cuentas fiscales y está revisando las metas y fechas de varios programas para lidiar con el déficit. "Brasil seguirá honrando todas sus obligaciones", ha apostillado.
Por su parte, el ministro de Hacienda de Brasil, Joaquim Levy, ha señalado que el Gobierno debería enviar en las próximas semanas al Congreso nuevas medidas de ahorro fiscal que garanticen un superávit fiscal primario de un 0,7 por ciento del PIB en el 2016.
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